El Barcelona de las jugadoras mallorquinas Mariona Caldentey y Patricia Guijarro jugará esta tarde en Budapest un partido histórico (18:00 horas / Gol Tv), al ser el primer club español en jugar una final femenina de la Liga de Campeones, y lo hará contra el gran dominador del torneo, el Olympique de Lyon.

El favoritismo recae por completo sobre el cuadro francés, vencedor de la Liga de Campeones en las tres últimas ediciones (cuenta con cinco trofeos), ya que el Barça, a pesar de haber sido uno de los equipos más competitivos en Europa en el último lustro, se encuentra muy lejos del poderío del Olympique. No obstante, a un solo partido la contienda se presenta algo más igualada que no en un doble choque, como el de ambos el año pasado en cuartos de final, donde el Barça perdió en la ida en un encuentro claramente dominado por las francesas (2-1), y en el Miniesdi en la vuelta volvió a ser superado por un 0-1. En los últimos años, el conjunto femenina del Barcelona no ha podido lograr el campeonato español, que se le resiste por cuarto curso consecutivo, pero en cambio en la Liga de Campeones ha dado un paso firme como nunca antes lo había hecho un club de la Liga española, ya que llegó a una semifinal (hace dos años), a cuartos (el año pasado y a hace tres) y la final de esta temporada.

Las jugadoras del recién renovado Lluís Cortés viven un idilio con la Liga de Campeones, pero la corona de campeonas va a ser una empresa casi imposible ante un rival que es claramente más fuerte y juega muy bien al fútbol.