El Mallorca está luchando por el ascenso a Primera División sobre el terreno de juego, aunque si fuera por la asistencia media de espectadores a sus partidos en Son Moix, estaría en la parte media baja. Porque los bermellones, que ocupan la cuarta plaza en la clasificación, bajan hasta la decimoquinta en cuanto al número de fieles que acuden a sus encuentros. Así lo acredita el informe de la cuenta de Twitter @vintage_stats, basada en los datos oficiales de la Liga de Fútbol Profesional. Un total de 7.750 personas suelen acudir a animar a los de Vicente Morenoal estadio, una cifra que está muy lejos de otros clubes de la Liga.

El primero en esta particular estadística es el Real Zaragoza, que a pesar de estar cuajando una mala temporada, tiene el respaldo de 20.836 hinchas. Y el Sporting (19.464), Málaga (18.162) y Deportivo (16.526) son los siguientes de la lista. El Mallorca está por delante del Almería (7.359), precisamente su adversario de este domingo, y Nàstic, Lugo, Numancia, Rayo Majadahonda y Alcorcón, que con 2.877 espectadores, es la entidad con menos respaldo.

Llama la atención que clubes de localidades con menos habitantes que Palma y, por extensión que la isla, como Almendralejo, Albacete, Elche u Oviedo registren cada dos semanas entradas sustancialmente mejores que la de Son Moix. Las causas de que no acuda más gente a animar al Mallorca, justo en la temporada en la que está en la parte alta de la tabla, son varias. El club, que el pasado verano presentó los segundos abonos más baratos de la categoría -entre 85 y 210 euros para un adulto, solo por detrás del Rayo Majadahonda- tiene 10.200 socios, pero la realidad es que, como ya informó este diario hace meses, suelen fallar un treinta por ciento de ellos. De hecho, el Mallorca ha aumentado un treinta y cinco por ciento la venta de entradas en taquilla respecto a sus últimas campañas en Segunda y eso compensa la ausencia de una parte de los que pagaron su carnet en verano.

Hay voces que apuntan que estos ocho mil aficionados son la masa social real de la entidad, pero hace dos jornadas, ante el Sporting, acudieron 11.302. Otros critican la política del club de no abrir todo el estadio para que puedan acudir a zonas más económicas que la Cubierta o de que no haya promociones de entradas para los socios en los partidos importantes. Algunos piden entradas más baratas -vale entre 20 y 45 euros por partido-, pero la realidad es que, sea por el motivo que sea, el Mallorca fantasea con regresar a la elite con menos volumen en las gradas que la mayoría de sus rivales aunque, eso sí, no le impide ser el segundo mejor local de la Liga.