La tensión traicionó a un Iberojet Palma que vio quebrada su racha de nueve victorias consecutivas en Son Moix tras caer en la prórroga ante el Covirán Granada por 83 a 88.

Los de Félix Alonso realizaron un partido con un esfuerzo tremendo para remontar una desventaja de 17 puntos, pero que perdonó en una prórroga sin puntería y los andaluces empatan la eliminatoria.

El Iberojet Palma empezó mandando gracias a una excelente serie anotadora desde el triple, siete de nueve. Sin embargo, el agujero defensivo de los mallorquines permitía al conjunto andaluz anotar varias penetraciones sin oposición y la ventaja tras el primer cuarto era mínima, 25 a 24.

La consistencia y el acierto de los granadinos con dos triples consecutivos permitían darle vuelta al marcador, 26 a 30. No obstante, una canasta de Barac y una falta antideportiva de Iriarte sobre Guerra activaron a los locales para volver a abrir distancias en el electrónico, 45 a 37.

Justo en este momento, Guerra se marchaba al banquillo y los minutos sin él en pista fueron toda una pesadilla.

El colapso mental de los de Félix Alonso dejó escapar otra buena ventaja ganada a pulso, 45 a 43 al descanso.

Las malas noticias persistían; el alero Marcus Gilbert, irreconocible en la serie, cometía su tercera falta personal y lo peor, el Granada iniciaba una exhibición de carácter y de intenciones ayudados por su estado de gracia desde el triple anotando seis tiros sin fallo desde ese rango, 50 a 67.

Las decisiones arbitrales, permitiendo una defensa de muchos contactos, no fueron excusa para un Iberojet con insuficiencia anotadora, 56 a 71.

Una reacción épica de los locales, que firmaron un parcial de 20 a 3, permitía remontar un encuentro que parecía estar muerto, 78 a 74.

Sin embargo, los mallorquines se quedaron petrificados en los últimos tres minutos y medio de duelo y el Granada forzó la prórroga, 80 a 80, tras ver peligrar la eliminatoria.

Los cinco minutos extra tuvieron poca historia. El Iberojet perdonó errando los tiros de campo y, sobre todo, los seis tiros desde la personal que eran un regalo caído del cielo para superar a un Granada que en la prórroga vivió de un triple anotado al inicio y de la reivindicación de Wright bajo los tableros para así, empatar la serie tras vencer en Son Moix por 83 a 88.

Ahora, el Iberojet visitará la pista del Granada con la obligación de sacar uno de los dos partidos si no quiere despertar de su sueño, el de ascender a la ACB. El primero será el viernes a las 21:00 horas.