El tenista mallorquín Rafa Nadal, número dos del mundo, ha asegurado que se encuentra "más o menos bien" físicamente para afrontar desde este miércoles su andadura en el Barcelona Open Banc Sabadell-67º Trofeo Conde de Godó, a pesar de que en los últimos meses ha tenido "demasiados altibajos no tenísticos" que le han impedido tener regularidad, aunque no considera que haya tenido un mal inicio de año, lo que demuestra que está "el número tres" de la Carrera a Londres.

"El trabajo siempre es el mismo: encontrarme a mí mismo. Durante estos últimos 18 meses he tenido demasiados parones, demasiados altibajos no tenísticos. El año pasado, terminando siete torneos, terminé dos del mundo; este año he vuelto a tener más problemas de los que me hubiera gustado a comienzo de año. Cuando uno tiene muchos problemas es muy difícil coger un ritmo o una continuidad", ha declarado en un acto de promoció del torneo en el que ha peloteado con el japonés Kei Nishikori en el Palau de la Música Catalana.

Después de "unos momentos complicados personalmente", Nadal trata de recuperarse como ya hiciera en otras ocasiones. "Ha pasado tantas veces y al final las cosas se salvan que parece que todo lo que va ocurriendo se olvida, pero para el que lo vive es difícil lo que se está consiguiendo. Espero estar preparado para jugar bien, si no es aquí, en Madrid, y si no es en Madrid, en Roma, y si no, en Roland Garros. Uno no puede pretender estar siempre perfecto, ganar 14 Montecarlos o 14 Godós, porque las cosas no son así", ha recalcado.

Por ello, resta importancia a la derrota en semifinales del Masters 1.000 de Montecarlo ante Fabio Fognini, un partido que definió como uno de los peores de su carrera sobre tierra batida. "Peor se puede hacer, otra cosa es que mi opinión personal; jugué uno de mis peores partidos sobre tierra. Cuando uno lo hace no hay por qué esconderlo, es una realidad. No le veo beneficio a engañarse a uno mismo o a los demás", ha afirmado.

"En semifinales hice un partido malo, en los dos primeros partidos no jugué mal y el tercero fue más irregular. El cuarto fue contra un rival difícil y no estuve al nivel que me hubiera gustado estar. Lo único que puedo poner de mi parte es la ilusión, trabajo y actitud adecuados para intentar jugar de la mejor manera posible. Las cosas salen mejor o peor, pero es parte del deporte", ha continuado.

Además, Nadal considera que en Montecarlo dio "un paso adelante" en su forma física. "El torneo fue positivo, pero después uno pierde y las sensaciones son distintas. En Montecarlo perdí la oportunidad de empezar de una buena manera la temporada de tierra, y aquí hay otra oportunidad de dar un paso hacia adelante", ha advertido sobre el torneo barcelonés.

Sin embargo, solo sabrá su estado "a partir del miércoles". "Llegamos con la ilusión de jugar un torneo muy importante, especial y que es parte de la historia del deporte y de la mía personal. A nivel físico me encuentro más o menos bien. Vengo de una época complicada, con muchos problemas encadenados, y al final es difícil mantener según qué tipo de nivel", ha afirmado.

Por otra parte, el de Manacor no considera que haya hecho un mal inicio de temporada. "No he ganado ningún título en 2019, pero he estado en la final de Australia, en 'semis' de Indian Wells y de Montecarlo, y en Acapulco perdí en segunda ronda. Si me preguntas si el año está mal, no; estoy el número tres del 'Race'. He estado con más problemas de los que me hubiera gustado, pero a partir de ahí, ilusión y trabajo diario para hacer una buena temporada de tierra", ha explicado.

Por último, Nadal ha hablado sobre la retirada de David Ferrer en el próximo Mutua Madrid Open. "Lo importante es lo que él sienta y decida que le haga feliz, lo demás es secundario. Lo principal es que él esté feliz con lo que decida hacer y que tenga el adiós que merece como jugador y como persona", concluyó.