Jorge Lorenzo ya ha vuelto a subirse a la moto tras su lesión en la muñeca que le ha impedido estar en los primeros tests de la temporada.
El piloto mallorquín ha participado en el segundo día de los entrenamientos de Catar para empezar a amoldarse a su nueva moto.
El piloto de Honda fue notablemente más rápido el domingo en relación al sábado. El balear firmó un mejor tiempo de 1:55.742, un segundo más rápido que el día anterior.
A pesar de su reciente lesión en la muñeca, Lorenzo afirmó que "está bien", a pesar de que le "cuesta un poco en las frenadas". El piloto de Honda entiende los entrenamientos como una oportunidad para conocer la moto. "No hemos probado demasiados cambios hoy y nos hemos centrado principalmente en la ergonomía sobre la moto. Mañana estaremos más cerca, todavía es el primer día", afirmó.
Por otro lado, reconoce estar "preocupado" por el poco tiempo que le resta para el primer gran premio de Catar, escenario donde se disputará, del 8 al 10 de marzo, el primer gran premio de la temporada 2019. "Solo tenemos unas tres horas cada día, ya que después de las nueve de la noche la temperatura cae mucho y es difícil aprender en esas condiciones", indicó en declaraciones facilitadas por su equipo.
Jorge Lorenzo quiere llegar en las mejores condiciones posibles a Catar donde tiene registrado el mejor tiempo de la historia del circuito.
Su compañero de equipo, Marc Márquez, trabajó en la puesta a punto de su Honda y firmó el quinto mejor registro de la parrilla, a menos de medio segundo de Jorge Lorenzo.
El otro piloto mallorquín, Joan Mir, terminó el segundo día de pruebas en Losail undécimo, con un mejor tiempo de 1:55.280 con su Suzuki. Mir se situó a más de medio segundo de su compañero de equipo, Álex Rins, que registró la mejor marca del test en el circuito de Losail.
