El Govern ha ordenado repetir la Asamblea Extraordinaria y Ordinaria del pasado 27 de enero a la Federació Balear de Motociclisme (FBM). La Conselleria d'Esports ha detectado "defectos de forma y de planteamiento del sistema electoral" tras revisar la documentación relativa a ambas reuniones y las decisiones adoptadas. Desde la Direcció General d'Esports se entiende que "se ha perjudicado a la mayoría de clubes". Ya hay fecha para su nueva celebración, el próximo 16 de marzo.

En la Asamblea celebrada en enero se quedaron sin posibilidad de ejercer como asambleístas casi la mitad de la veintena de clubes con representación al no cumplir con los requisitos exigidos. Normalmente, la FBM avisa con tiempo a los motoclubes para que subsanen las deficiencias y puedan asistir y tener voto. Este año no hubo preaviso y una mayoría de sociedades deportivas no cumplían con las formalidades.

Desde la FBM se informó ese día a los asambleístas que esta situación solo afectaba a la Asamblea de este año y que en las siguientes no habría problemas. Sin embargo, la Direcció General d'Esports considera que estos clubes y sus representantes quedaban excluidos del proceso electoral de este año, de la Asamblea ordinaria y del proceso electoral de 2020 (es año olímpico y por Ley es obligatorio convocar elecciones, aunque se elija nuevo presidente en unos meses). Estarían fuera del censo para unas votaciones que posiblemente serán ya en 2021.

Según la Conselleria d'Esports, existen "defectos de forma" en la celebración de la Asamblea y "de planteamiento del sistema electoral", por lo que ha ordenado a la FBM subsanarlos y volver a celebrar la Asamblea.

Antes de la Ordinaria se celebró una Extraordinaria en la que se aprobó el calendario para las elecciones a la presidencia. Rafa Cañellas ha dirigido la FBM de forma interina (en funciones) tras la dimisión el año pasado de Pedro Mas, pero no puede prolongarse su presidencia más tiempo y deben realizarse elecciones. Se había aprobado el proceso electoral y la votación se iba a celebrar en mayo o junio.

Después, en la Asamblea Ordinaria se aprobaron las cuentas de 2018 y el presupuesto previsto para 2019, además de darse el visto bueno al calendario de competición. También deberá repetirse, aunque no es probable que se modifique nada de lo aprobado en enero pese a que los asambleístas eran aproximadamente la mitad de los que deberían haber sido.