Coincidiendo con su primera carrera del año y tras una auténtica lección de casta y decisión, el alemán Emanuel Buchmann, de 26 años y ciclista del equipo Bora-Hansgrohe, se impuso ayer en solitario en la segunda prueba de la XXVIII Challenge Ciclista de Mallorca, el Trofeo Andratx-Lloseta.

Una alocada prueba, de 172 kilómetros y resuelta a una velocidad media de 37.02 kilómetros por hora, que empezó con sobresalto al verse obligada su organización a modificar, a primera hora de la mañana, su recorrido final tras el hundimiento de un tramo de la calzada de la carretera de descenso de Lluc a Caimari.

En carrera, el corredor germano, en un meritorio ejercicio de capacidad agonística, rodó y resistió en solitario en cabeza a lo largo de los 20 kilómetros finales, perseguido por un grupo de unos 20 rivales. Una avanzadilla de hombres importantes en la que estaba el campeón mundial Alejandro Valverde, del Movistar; el vencedor de la prueba del jueves, el conquense Jesús Herrada; el belga Tim Wellens; o hombres relevantes en el pelotón como son el irlandés Dan Martin, el italiano Gianluca Brambilla, Warren Barguil y Guillaume Martin.

Enfrentándose a un fuerte viento de cara a lo largo de su aproximación a Lloseta, Buchamn padeció para llegar a disponer de hasta 40 segundos de ventaja, acosado por unos perseguidores que se fueron relevando en sus tareas estériles de caza.

Marc Buades, Albert Torres, Alejandro Valverde y Joan Martí Bennàssar en la salida de Andratx. EFE

Finalmente, Emanuel Buchmann se salió con la suya y tras un auténtico calvario celebró su victoria en meta con entusiasmo. Especialmente porque hasta ayer solo contaba con un triunfo como profesional, pese a acumular distinguidos resultados en pruebas de prestigio como la Vuelta a España, el Dauphiné, el Tour de Francia o la Vuelta al País Vasco.

Valverde terminó décimo

El alemán cruzó la línea de meta con 16 segundos de ventaja sobre el belga Tim Wellens, del Lotto-Soudal, el holandés Bauke Mollema, del Trek-Segafredo, y Pieter Weening, del Roompot-Charles. Jesús Herrada, como primer español, concluyó quinto, y Valverde, visiblemente desgastado, terminó décimo, a 51.

"Es una buena forma de comenzar la temporada", destacó el ciclista de Ravensburg. Uno de los compañeros de Peter Sagan que en diciembre preparó la temporada entrenando en Mallorca. "Uno de mis objetivos para el 2019 era mejorar mi habilidad para ganar carreras. Pero no esperaba ganar la primera", desveló sobre sus ambiciones previas a su "inesperado" triunfo de ayer.

"Normalmente uso las primeras carreras de la temporada para intensificar mi entrenamiento y preparación, antes que para competir. Es por eso por lo que ataqué cuando tuve la oportunidad. Creo que en general he mejorado mi nivel durante el invierno, aunque puede que sea muy temprano para decir eso. Eso sí, me siento realmente muy feliz", reconoció.

Durante muchos kilómetros los protagonistas del Trofeo Andratx-Lloseta fueron los componentes de un pequeño grupo de corredores escapados. La fuga empezó en el kilómetro 25 y entre sus protagonistas destacaban el italiano Simone Petilli, del Team Emirates; Toms Skujins, del Trek-Segafredo; Nicolas Edet, del Cofidis; Peio Goikoetxea, del Euskadi; Oscar Pelegrí, de la Selección de España de pista; y Sergio Samitier, del Euskadi-Murias.

Landa no será operado

La neutralización definitiva de los escapados, quienes sufrieron mucho en el ascenso al Puig Major desde Sóller, tuvo lugar de forma escalonada y se completó en el kilómetro 149, a 24 de la meta de Lloseta. Después de llegar a disponer de una renta máxima superior a los cuatro minutos.

La jornada, por segundo día consecutivo, resultó negativa para el Movistar Team en Mallorca. Y es que el único equipo español del UCI World Tour volvió a perder a uno de sus peones por fractura de clavícula. En esta ocasión fue el madrileño Carlos Verona. Ciclista que en los primeros compases de la prueba, cuando se rodaba con lluvia y sobre mojado, se fue al suelo. Y sobre Mikel Landa, ayer se decidió en Vitoria que no pase por el quirófano por su fractura de clavícula, por no ser "completa".