El Palau Municipal d'Esports de Son Moix alberga hoy viernes, a las 20:30 horas, la final de los aspirantes. Palma Futsal y Osasuna Magna se juegan la cuarta plaza de la clasificación en un duelo de dos equipos que se presentan como candidatos a asaltar el trono del poder establecido por los tres grandes del fútbol sala nacional, dos equipos que llevan años tocando a la puerta y que amenazan con dar la campanada en alguna ocasión. El portero Carlos Barrón, por lesión, es la única baja que tiene el Palma.

El Palma Futsal es el cuarto en la tabla y supera a los navarros con un punto de ventaja tras las tres victorias que encadena en este mes de enero, en el que no conoce la derrota. Llega en un gran momento de forma y tras reencontrarse con su juego y los goles.

Es un partido decisivo al enfrentarse dos rivales directos que luchar por ser uno de los cuatro equipos que tengan el factor pista en el futuro play-off. El que gane conseguirá un gran botín con tres puntos que tendrán un plus al dejar a un rival directo sin sumar esta jornada. Además, hay otro duelo en la cumbre entre Movistar Inter y ElPozo Murcia, por lo que el Palma podría aprovechar para recortar terreno con los de arriba.

Es un encuentro señalado en rojo en el calendario de los mallorquines, que quieren sacarse la espina de la goleada encajada en el partido de ida y que supuso la primera derrota de la temporada tras un comienzo inmaculado.

El enfrentamiento entre mallorquines y navarros simboliza la lucha de los equipos que cada año pelean por competir con los grandes, pero con un presupuesto limitado y sin excesivos recursos.

Ambos, junto al Jaén Paraíso Interior, se han alternado en la pelea por la cuarta plaza y son los tres equipos llamados a jugarse dicha posición. Se miden el equipo que marcó un camino a seguir y que ha recorrido el Palma en las últimas temporadas, el espejo en el que se miraron cuando subieron hace una década.