"El Mallorca no gana a ninguno de los equipos de arriba", se ha oído en más de una ocasión en esta primera vuelta. Era una de las asignaturas pendientes del equipo en lo que se lleva de temporada y que anoche pudo superar.

El obús de Lago Junior dio mucho más que tres puntos a los bermellones. Tumbar al todopoderoso Deportivo de la Coruña (1-0), que tiene como único objetivo regresar a Primera División, alimenta la autoestima de un grupo que necesitaba una victoria de prestigio para seguir un camino de dimensiones desconocidas.

Es cierto que no ha bajado de la octava posición en veintiuna jornadas, pero este triunfo era necesario después de haberse quedado con las ganas ante otros de los 'gallitos' de la Segunda División. Dio una buena imagen ante el Granada (1-0), tuvo que doblar la rodilla en un accidentado duelo ante el Albacete (1-3), tuvo que resignarse ante el Málaga (1-2) y sufrió su primer golpe en Alcorcón (1-0). Todos estos equipos están por encima en la clasificación, como también lo están los gallegos, de ahí que este éxito ayude a quitarse una espina.

Como bien recordó el propio entrenador Vicente Moreno en la sala de prensa, el Mallorca también ha vencido a Osasuna (1-0) y al Cádiz (1-0), pero en el momento de estos partidos ambos conjuntos estaban por debajo en la tabla. La moral del vestuario se refuerza con éxitos como este. Ser superior al Dépor, sobre todo en la segunda parte, no es casualidad. Por eso estos tres puntos saben tan bien.

Por otra parte, la Liga de Fútbol Profesional anunció ayer que el partido ante el Cádiz en el Estadio Carranza se disputará el sábado 26 de enero a las 20:30 horas y será retransmitido en abierto por Gol Televisión.