Javier Mánix Mandiola, entrenador del Atlético Baleares, transmite optimismo y satisfacción. La positiva marcha de su equipo, tercero en la clasificación del Grupo III de la Segunda B, es el motivo de la complacencia y orgullo que contagia el técnico vasco.

"Las notas de la primera parte del curso son buenas, ahora toca mantenerse en esta línea. De lo hecho estamos orgullosos porque nos ha traído hasta aquí, pero para llegar a buen puerto debemos seguir en esta dinámica. El equipo me transmite confianza", defendió ayer Mandiola en su exposición previa al partido de mañana, domingo, ante el Castellón.

"Hubiera firmado acabar la primera vuelta terceros y con 34 puntos. Los números que tenemos son muy buenos", destacó el principal protagonista de la excelente racha del conjunto blanquiazul.

Sin embargo, Mánix se enfrenta en los últimos días a un quebradero de cabeza más, que afecta a la nueva configuración de su equipo. Con la posibilidad de realizar incorporaciones y asumir algunas bajas. Aunque, ante todo eso, impone la premisa de que lo se decida "debe ser para mejorar".

"Para subir o ganar una Liga nos faltan cosas, pero somos un equipo. Un equipo hecho y entero que para mejorar tiene que venir alguien que marque la diferencia y no es fácil conseguirlo", plantea.

"No queremos que con la plantilla que tenemos tan corta se nos haga larga la temporada. Si viene alguien es para lograr mejorar a los demás, porque hay partes del campo sin recambios y hemos tenido suerte que las lesiones y las tarjetas han sido escalonadas", reflexionó ayer Mandiola.

Y lo que también quiso dejar claro Mandiola es que no hay nada decidido todavía en torno al portero Rubén Miño, quien ha entrenado esta semana con la plantilla del Atlético Baleares. "Entrenará toda esta semana con nosotros y luego se valorará su incorporación o no a nivel de club. Todavía no se ha decidido nada y hay otras variantes", explicó sobre la situación del ex portero catalán del Real Mallorca. "Toca valorar que no ha competido en dos años, pero se ve que es un portero de categoría y que de la lesión está curado", precisó el entrenador.