El IME está pendiente de recibir los 1,5 millones de euros procedentes de la Ley de Capitalización para tener asegurado el dinero necesario del proyecto de remodelación de Son Hugo. A partir de ahí se iniciará el proceso: presentará el pliego de la obra a sus servicios servicios y, si no se producen más retrasos, Intervención revisará las partidas económicas y después Cort dará su visto bueno.

A continuación se procederá a la licitación de la obra y, si las empresas descartadas en el concurso no recurren la decisión, se iniciarán las obras en el verano de 2020 después de un sinfín de trabas burocráticas que han provocado que la remodelación de Son Hugo se haya retrasado en varias ocasiones.

Si todo va bien, la instalación se pondrá en marcha en el primer trimestre de 2020, porque las previsiones son que los trabajos tengan una duración de entre ocho y nueves meses. "Como mal menor, a más tardar, las piscinas se abrirán a principios de verano", apuntó el gerente, José María González, que el pasado 21 de diciembre vio cómo el Consell de Mallorca entregaba los 713.000 euros que había aprobado en febrero de 2018.

Cabe incidir en que si se produce algún retraso más en el paso del proyecto por los servicios jurídicos o Intervención, podría llegarse a mayo sin que se haya licitado la obra. Y ese mes hay elecciones autonómicas y municipales, por lo que un cambio político -que no repita el PSOE como responsable del deporte de Palma o que manden en Cort el PP o Ciudadanos, por poner un ejemplo- podría echar al traste de nuevo una reforma que era urgente y necesaria en 2017, pero que se está haciendo eterna. Se iban a abrir las piscinas en 2018, después en 2019 y ahora el objetivo es el verano de 2020.