Poco más se le puede pedir a Lago Junior, que realizó una primera parte soberbia, rubricada con dos goles, goles de delantero de área. El primero tras aprovechar un rechace de un defensa del Zaragoza. Estaba en el lugar y el momento adecuado para batir a Álvarez con la izquierda. Era el minuto seis. Catorce después marcaba el segundo, de cabeza, a centro de Aridai y después de que Álex López arrastrara a los centrales. Su partido de ayer no solo será recordado por sus dos goles, sino por su gran entrega, hasta el punto de que, a falta de diez minutos, pidió el cambio, agotado, cuando Moreno se disponía a sustituir a Aridai para dar entrada a Giner. Lago Junior culminó un gran partido, con dos dianas que le permiten alcanzar las siete, una cifra más que respetable cuando se han cumplido catorce jornadas.