Antonio Vadillo hizo tras el partido un ejercicio de autocrítica después del contundente 8-1 encajado en el Palau Blaugrana, y lamentó la "bajada de brazos" de sus jugadores a partir del cuarto gol azulgrana. "En primera parte el partido ha sido bastante equilibrado, más allá del resultado. Estábamos con buenas sensaciones, con el partido como queríamos. En la segunda no hemos salido bien, el Barça nos ha ahogado la salida del balón. Nos han pasado por encima. Cuando vimos que nos costaba crear ocasiones, hemos puesto portero-jugador para crear peligro, pero el 4-1 nos ha costado muy caro. El equipo se ha venido abajo. Lo que más me preocupa es la bajada de brazos que hemos tenido en los últimos ocho minutos. No nos lo podemos permitir. Nos ha faltado saber manejar la situación y tener capacidad de sufrimiento", se quejó el entrenador del Palma Futsal.
Con lo abultado del resultado no se refirió a la polémica en los dos primeros goles del Barcelona, conseguidos ambos, probablemente, de forma antirreglamentaria. El primero al no traspasar el balón del todo la línea de gol y el segundo porque nace de una jugada en la que el balón sale de banda.
Por su parte, el guardameta Carlos Barrón definió el partido de "muy duro" por lo abultado del resultado. "La primera parte ha sido muy igualada aunque alguna decisión de los árbitros les ha favorecido. Hemos recibido muchos goles. Nos ha faltado intensidad. Nos hemos desconectado, pero hemos de saber dónde nos hemos equivocado y tenemos un margen de mejora increíble", reflexionó el portero cordobés.
El cierre brasileño Tomaz insistió en la necesidad de "hacer autocrítica tras la goleada. "La primera parte ha sido muy igualada, en la que creamos algunas ocasiones. En la segunda ha habido una desconexión del equipo importante y no puede volver a pasar. Pero la Liga es muy larga, estamos en una buena situación y hay que seguir peleando para estar lo más arriba posible", concluyó el futbolista sudamericano.
