El mallorquín Enric Mas admitió que él y sus compañeros de selección terminaron el Mundial "llorando como magdalenas" por su satisfacción ante la victoria de Alejandro Valverde en el durísimo Campeonato de Innsbruck. "Ha sido increíble. No sé si estoy más contento ahora o cuando hace dos semanas subí al podio de la Vuelta. Hemos llorado como magdalenas; después de una vida luchando por un arcoíris, en uno de sus últimos años, Alejandro lo ha conseguido y es una pasada", dijo Mas al llegar a meta y ver a Valverde con el maillot arcoíris.

"Hemos convivido en Sierra Nevada, en Granada, de risas y de cachondeo; a la hora de trabajar, trabajábamos, pero el grupo que hemos hecho ha sido impresionante", describió el corredor mallorquín respecto a sus días de preparación con la selección.

Enric Mas también quiso "dar la enhorabuena" al seleccionador nacional, Javier Mínguez, por ser "el que organizó todo esto de hacer la concentración y de descansar bien" antes de viajar a Austria. "Javier Mínguez sabía que era el Mundial de Alejandro y así ha sido. Yo me he quedado vacío en la última vuelta, pero ha sido impresionante", concluyó Enric Mas.

Por su parte, emocionado y lloroso, Alejandro Valverde se quedó "sin palabras" y confesó que llegó a pensar que "nunca podría ser campeón del mundo". "Es increíble. Han sido tantos años luchando y al fin se ha conseguido. Es la mejor victoria de mi carrera. Lo que he soñado durante años. Es algo que perseguía y perseguía. He estado muchas veces cerca, llevaba seis medallas pero ninguna había sido de oro", recordó el murciano, peltórico y ya luciendo el maillot del arco iris.