Con motivo de la Eurocopa-96, el fútbol inglés entonó como anfitrión la canción oficial de los Lightning Seeds titulada "Football's coming home" (el fútbol vuelve a casa) reivindicando su condición de inventores de este deporte. Desde entonces, en cada torneo futbolístico que juegan, esa canción es la antesala de sus ilusiones siempre rotas. En los primeros Mundiales de 1930, 1934 y 1938, Inglaterra no participó porque en su condición de profesionales se consideraban superiores y no concebían participar en torneos 'amateurs'. Ellos eran los 'pross'.
Inventores. Cuando se dieron cuenta de hasta dónde llegaba 'su' fútbol, en 1950, ya sí tuvieron a bien participar. Y desde entonces ganaron un Mundial, el de 1966 organizado por ellos, gracias a que no existía el VAR, y nada más. De hecho nunca han ganado la Eurocopa. Sus mejores torneos fueron en el Mundial-90 donde fueron semifinalistas y el actual de Rusia-2018, también semifinalistas, cayendo en este caso ante Croacia en la prórroga. El título de la canción debe cambiar y pasar a ser "Football does not come home" (el fútbol no vuelve a casa).
Misterio. Y resulta del todo asombroso asistir a cada batacazo del fútbol inglés en los grandes eventos con solo repasar algunos de los nombres de los futbolistas que han hecho grande el fútbol inglés, aunque no tanto a la Selección de Inglaterra. En diversas etapas de mundiales y eurocopas esta es la lista: Keegan, Francis, Lineker, Hoddle, Waddle, Shilton, Seaman, Platt, Clemence, Gascoigne, Beckham, Owen, Scholes, Shearer, Fowler, Gerrard, Lampard, Rooney?
Esta vez, con los Kane, Pickford, Sterling, Trippier, Walker, Rashford, Vardy o Henderson, tampoco han podido. ¿Qué le falta a Inglaterra para dar ese salto que le falta? ¿Por qué nunca están a la altura? Sigue siendo un misterio por qué el fútbol nunca vuelve a casa, a donde lo inventaron, cuando la Premier League está considerada una de las mejores ligas si no la mejor, incluso antes de que desembarcaran jugadores de otras nacionalidades.
