El Iberostar Palma sufrió ayer la séptima derrota consecutiva tras caer en la cancha del ICL Manresa (72-67), en un partido que, eso sí, los mallorquines consiguieron competir ante uno de los rivales más potentes de la categoría. Sin embargo, llegados al punto en el que se encuentra el Palma cada derrota, sea ante el rival que sea y se produzca como se produzca, castiga en exceso a un equipo que sigue en descenso y a dos victorias de los rivales que marcan la permanencia.

El conjunto balear fue el dominador de casi todo el primer periodo. Rafa Huertas y Carles Bivià soportaron todo el peso ofensivo del equipo con trece puntos entre ambos que permitieron al conjunto verdinegro ir siempre por delante. A un minuto del final un triple de Lundberg ponía por delante a Manresa por primera vez pero una canasta de Tau Slezas cerraba el primer parcial con ventaja visitante (14-15).

El conjunto catalán, muy desacertado en los diez primeros minutos, afinó un poco su mirilla y se hizo con el dominio del segundo periodo. Cuatro minutos y medio tardó el Palma en anotar la primera canasta. Hasta ese momento, un parcial de 7-0 para los locales, ventaja que ya no iban a dejar escapar (21-15). Los manresanos llegaron a obtener una ventaja de diez puntos hasta que dos canastas de Huertas volvían a apretar las cosas a dos minutos y medio del descanso (30-26).

En ese tiempo el Palma sólo pudo sumar una canasta, de Roger Fornas, y eso lo aprovechaba el Manresa para ir a vestuarios con una ventaja cercana a los diez puntos (35-28). Las pérdidas de balón y la precipitación, que se empezaba a apoderar del equipo de Félix Alonso, castigaba en exceso al Palma que veía cómo el conjunto catalán ampliaba poco a poco su ventaja para alcanzar los quince puntos (51-36). Cuando pintaba peor para los mallorquines, el equipo balear reaccionaba con tres triples para cerrar el tercer cuarto y mantener opciones para firmar la remontada (55-49).

Manresa recuperaba los diez puntos de ventaja de manera inmediata y parecía tener controlado el partido hasta que Huertas firmaba seis puntos consecutivos para meter el miedo en el cuerpo al Nou Congost (66-61). Los locales dieron opciones al Palma a seguir recortando distancias pero apareció el miedo a ganar y, de nuevo, el equipo se bloqueó en ataque para impedir cualquier opción de firmar el sorpresón de la jornada. Al final, el Manresa se imponía por 72-67 y el Iberostar Palma sigue sumergido en la zona de descenso y en una situación cada vez más complicada.