Agentes del Servicio de la Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) han reactivado a lo largo de esta semana las investigaciones en torno a la Operación Cabriol. Una intervención que iniciaron el 15 de abril del año 2015 con un gran despliege en el Hipòdrom Son Pardo, con la intervención de un centenar de agentes. Hubo numerosas detenciones y la puesta en escena de un amplio dispositivo, con el objetivo de luchar contra el maltrato animal y el intrusismo profesional en el deporte del trote. Entre los detenidos destacó la mayoría de los principales conductores y entrenadores mallorquines.
En esta ocasión, la intervención del Seprona ha consistido en visitas a las cuadras de los principales implicados en la Operación Cabriol. Y se han centrado en una inspección ocular del estado de los caballos a los que el 15 de abril del 2015 en Son Pardo se sometió a diferentes análisis para comprobar si su organismo presentaba sustancias dopantes.
Lo curioso es que la mayoría de los 16 caballos que fueron analizados por el Seprona, con la ayuda de diferentes veterinarios, ya no están en competición, ni en Mallorca. Unos por la edad, dedicados ahora a actividades hípicas ajenas a la competición, y otros por haber pasado a ser dedicados a la reproducción.
Desde hace un año no se conocían actividades de la Guardia Civil en torno al caso de la Operación Cabriol. Por eso ha sorprendido el interés demostrado ahora por los agentes del Seprona por unos caballos que hace más de dos años no visitaban, ni despertaban para ellos ningún tipo de interés público.
Eso sí, en los últimos meses la fiscal que se encarga del caso admitió a Diario de Mallorca su intención de presentar acusación pública contra los numerosos investigados e imputados cuando se fije fecha de juicio. Una actuación que por el momento se desconoce si finalmente se ha formalizado cuando apenas quedan dos meses para que se cumplan los tres años de la espectacular intervención del Seprona en el Hipòdrom Son Pardo y diferentes centros de entrenamientos privados de caballos que funcionan en la Part Forana mallorquina. Eso sí, el golpe de efecto conseguido esta semana por la Guardia Civil ha sido importante.
