El Real Mallorca y el Atlético Baleares disputan hoy uno de esos partidos que siempre se recordarán. Sea cual sea el resultado, el derbi de las pasiones se disputa en Son Moix ente dos equipos que saldrán con el cuchillo entre los dientes y que necesitan ganar para seguir alimentando sus esperanzas de alcanzar sus objetivos inmediatos. Los bermellones para romper su racha de seis encuentros sin vencer -cinco empates y una derrota- y los blanquiazules para confirmar que el triunfo ante el Formentera de la pasada jornada (1-0) no fue un espejismo.

Los locales son los líderes y los visitantes ocupan puestos de promoción de descenso, pero un duelo de estas características jamás entiende de dinámicas. Lo que está claro es que hoy no solo se disputan tres puntos. También está en juego el orgullo de dos aficiones que son conscientes que el desenlace del duelo tendrá consecuencias, pero más en su estado de ánimo que en la clasificación.

Son Moix va a registrar la mejor entrada de la temporada y las previsiones apuntan a que se alcanzarán los doce mil espectadores, unos novecientos de ellos procedentes de Son Malferit. La hinchada blanquiazul se ubicará en el Fondo Sur entre fuertes medidas de seguridad ya que el encuentro ha sido declarado de alto riesgo por las fuerzas del orden. A tenor de la demanda de entradas, el Mallorca se ha visto obligado a abrir dos pastillas más en la Tribuna de Sol ya que hace días que no queda papel para ocupar la Grada Lluís Sitjar y la Tribuna Cubierta. Si los nueve mil abonados de la entidad no faltan a la cita, en esas zonas no va a haber ni un asiento libre.

Este partido ha despertado tanta expectación que son más de cien los acreditados por parte de los medios de comunicación para cubrirlo, una cifra más propia de la Liga de Campeones que de Segunda B.

Vicente Moreno se plantea apostar por la titularidad de Aridai en la banda derecha del ataque a pesar de que apenas ha completado tres entrenamientos tras llegar procedente de la Cultural Leonesa. El canario ocupará uno de los extremos, algo que provocará que Cedric pase a ocupar su posición natural en la delantera, tras dos semanas seguidas pegado a uno de los flancos. La sanción de Abdón le abre las puertas al canterano, que presumiblemente compartirá ataque con Álex López. El preparador recupera a Bonilla para el lateral izquierdo tras cumplir su castigo y el resto de futbolistas apunta a que serán los mismos que cayeron en Santa Eulària.

Por su parte, Horacio Melgarejo, que no puede contar con los lesionados Xisco y Rodri, ni con el meta Carl, recupera al delantero Gerard Oliva, aunque parece que el catalán esperará su oportunidad en el banquillo. Canario y Hugo Díaz, que causaron una buena impresión tras llegar en este mercado invernal, formarán la dupla ofensiva. El entrenador argentino mantendrá a los mismos que vencieron al Formentera en la anterior jornada, con el único cambio de Fullana, que estaba sancionado, por Villapalos en el centro del campo. A las 12 horas empezará a rodar un balón que promete emociones fuertes. Es para no perdérselo.

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  • RCD Mallorca - Atlético Baleares, en directo (Domingo, 12h)

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