La tripulación del Ocean Dream, formada por cinco mujeres que han superado un tumor, estará varios días en la isla canaria para reponer fuerzas y estibar el barco antes de poner rumbo a Cabo Verde y Martinica. La travesía arribó el miércoles a la isla de Lanzarote tras recorrer más de 1.000 millas náuticas sin escalas desde la localidad malagueña de Benalmádena. La travesía se desarrolló sin incidencias, según explicó Natalia Enseñat, tripulante e impulsora de este proyecto por el que cinco mujeres que han sufrido cáncer están cruzando el Atlántico para dar visibilidad a la enfermedad y recaudar fondos para la investigación.

"Ha sido un tramo muy agradable en el que hemos podido disfrutar de la navegación por el Mediterráneo y el Atlántico, y hemos visto ballenas, delfines y hasta un pez luna", explicó Enseñat tras tomar tierra en Lanzarote, de donde el Ocean Dream zarpará la semana que viene (posiblemente el lunes) rumbo al archipiélago de Cabo Verde, antes de iniciar el ´asalto´ final a la isla caribeña de Martinica. Enseñat aseguró que toda la tripulación se encuentra animada y que estos días en Canarias servirán para "estibar el barco y recuperar fuerzas".

"De momento está siendo una experiencia fenomenal, muy intensa, ya que la mayoría estamos aprendiendo a navegar y convivir en un barco, que es un espacio muy reducido", añadió Enseñat, quien destacó la "relativa facilidad" con la que el Ocean Dream cruzó el estrecho de Gibraltar, con menos tráfico marítimo del esperado, y la diferencia entre el Mediterráneo y el Atlántico. "Al entrar en el océano te das cuenta de que el viento y el tipo de ola han cambiado. En el último tramo hemos surfeado mucho gracias a que soplaban portantes y hemos alcanzado velocidades muy altas".

Las guardias nocturnas son "los momentos más exigentes" para las marineras contra el cáncer, pero también los que "más se disfrutan", según señala Natalia Enseñat: "La luna tarda mucho en salir y en la oscuridad puedes ver las estelas fluorescentes de los delfines, es algo mágico".

En Lanzarote se producirá un relevo de la tripulante Caterina Massutí, cederá su puesto a Belén Camps. Seguirán a bordo Natalia, Elena Piña, Mónica García y el capitán, César Enríquez. Para al trayecto de Lanzarote a Martinica se incorporará el regatista Eduardo Horrach, quien, pese a su larga experiencia en el circuito internacional de vela, no ha cruzado nunca el Atlántico. Por último, desembarcará la experimentada regatista Helena Alegre quien ha acompañado a la tripulación en el primer tramo de su viaje.

A medida que avanza, el proyecto Ocean Dream sigue recaudando fondos para la investigación del cáncer. Hasta el momento se han obtenido más de 33.000 euros, equivalentes a unas 3.300 millas. Algo más de 2.000 de estas millas han sido adquiridas por empresas y entidades (Real Club Náutico de Palma, Eserp Bussines School, Clínica Rotger y Quirónsalud Palmaplanas, Ángel 24, Fornés Logistic, MA Abogados y Fan Mallorca) y las restantes por particulares a través del portal oficial de la iniciativa: www.oceandream2017.com.

Enseñat afirmó la tripulación siente "el apoyo y el calor" de los colaboradores del proyecto y animó a que la gente "siga participando". "Hemos sacado a la venta una toalla solidaria para incentivar las donaciones. No hay que olvidar que la misión principal de este proyecto es recaudar fondos para la Fundación Cris, que se dedica a investigar el cáncer. Estamos aquí para salvar vidas a través de aquello que es más útil: el avance en los tratamientos de la enfermedad".