El Formentera apelará a su campo, de césped artificial, y al apoyo de 3.000 incondicionales que llenarán este miércoles las instalaciones del recinto municipal de Sant Francesc, para plantarle cara al Athletic Club de Bilbao, que ve la Copa del Rey como un bálsamo para aliviar su delicada situación.

La ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey ve, de momento, al modesto equipo de la Pitiusa menor, decimosexto en la tabla del Grupo III de Segunda B con 10 puntos en diez jornadas disputadas, creer que la experiencia adquirida la temporada pasada en la eliminatoria ante el Sevilla le será de mucha utilidad ante el Athletic. "El partido para nosotros es una fiesta y, como tal, lo vamos a disfrutar", declaró el técnico de los formenterenses Tito García Sanjuán. "El año pasado ante el Sevilla pecamos de pardillos (el Formentera encajó sendas goleadas en los dos partidos), sobre todo, en los primeros minutos. Hemos aprendido, frente al Athletic esperamos no conceder tanto y plantar cara", añadió.

El Formentera no ha comenzado con buen pie su primer año en Segunda B. En diez jornadas, solo ha ganado dos partidos, con las mismas derrotas y empates (cuatro).

Esa trayectoria le tiene asomado al pozo del descenso y, además, el sábado recibe al líder invicto de la categoría, el Mallorca, tras saldar con un empate (1-1) la visita del Hércules el domingo pasado. "Está claro que nuestra prioridad es la Liga, por ello voy a dosificar a los jugadores ante un rival, el Athletic, intenso, agresivo, que nos va a exigir al máximo", subrayó Sanjuán.

El Athletic encara su estreno en la Copa con el objetivo de encarrilar una eliminatoria en la que parte como claro favorito, y la necesidad de encontrar un bálsamo para aliviar la delicada situación que atraviesa en la Liga.