"Muy satisfecho", extremadamente delgado -con apenas 61 kilos de peso-, y decidido "a descansar y recuperar a partir de ahora en Mallorca" para preparar muy pronto la temporada 2018. Así regresó ayer a la isla Enric Mas. El joven y prometedor ciclista natural de Artà -de apenas 22 años- que se ha convertido en una de las mayores sensaciones y revelaciones que ha dejado la disputa de la Vuelta a Españala Vuelta a lo largo de las tres últimas semanas.

Una carrera durante la que Enric Mas ha sido señalado por auténticos campeones, como Alberto Contador y Alejandro Valverde, como el principal relevo del ciclismo español para ganar las generales de las tres grandes rondas: Tour, Giro y Vuelta. Todo un honor y una gran responsabilidad.

A primera hora del mediodía, y tras una jornada dominical de ensueño, culminando en Madrid el domingo su primer concurso en una carrera por etapas de tres semanas, Enric Mas hizo gala de su discrección y humildad en el aeropuerto de Son Sant Joan a la hora de valorar su revelador concurso en la Vuelta a España.

Contrato ampliado

"He terminado muy satisfecho, con buenas sensaciones y tras ofrecer, creo, un buen trabajo al equipo", se limitó a comentar el nuevo gran valor del conjunto belga Quick Step. Un grupo deportivo belga que durante la disputa de la Vuelta, y vista su progresión, le ha ampliado su contrato una temporada más, hasta finales del 2019, tras su importante rendimiento en su primera campaña en la máxima categoría del ciclismo internacional de ruta, como es la UCI World Tour.

Sobre su destacado papel y protagonismo en la etapa con final en alto en el Angliru del sábado, colaborando por momentos en favorecer el triunfo de Contador, Enric Mas se limitó a destacar con normalidad y humildad que "forma parte de mi trabajo".

"Era un día importante para la Vuelta y la última oportunidad que me ofrecía la carrera para buscar la victoria y trabajar para los intereses en la general de David de la Cruz, quien finalmente se cayó en el descenso del Cordal, cuando yo tiraba de él, unos dos metros delante suyo", comentó sobre las diferentes situaciones de carrera que afrontó camino de la mítica cima asturiana.

Lo que no había trascendido hasta ayer es que a lo largo de la Vuelta, durante su segunda semana, Enric Mas debió superar una bronquitis que incluso le obligó a ser tratado con antibióticos y le impidió ser protagonista de la carrera, como logró en la sexta etapa, con final en Port de Sagunt. Siendo el gran animador de una larga escapada que le permitió terminar la etapa tercero.

Terminó bastante fuerte

"Lo pasé muy mal. Después me pude recuperar poco a poco y la verdad es que los últimos días ya me encontraba muy bien, lo que me ha permitido finalizar la Vuelta sintiéndome bastante fuerte", desveló ayer Enric Mas.

El profesional artanenc ya da por finalizada su temporada del 2017 y se prepara para disfrutar de unas semanas de vacaciones en Mallorca. "No me moveré de la isla. No estaré mejor en ningún otro lugar y me permitirá estar con gente de la que llevo lejos muchas semanas", adelantó sobre sus planes de descanso.

Un tiempo libre en el que disfrutará de una de sus grandes pasiones, como es el buceo a pulmón libre. Una actividad aeróbica que favorece la mejora de su condición física y su capacidad de recuperación. Aspecto que destaca su amigo y mentor Toni Colom, el ex ciclista profesional de Bunyola que le esperaba ayer en el aeropuerto en su regreso a la isla.