Patricia Guijarro (Palma, 1998) se ha coronado reina de Europa en Belfast. La mallorquina, máxima goleadora de la Eurocopa femenina sub-19 con cinco dianas, ha sido decisiva para que la selección española levantara el trofeo de campeonas. Descontaban segundos para llegar al minuto 90 cuando un agónico cabezazo de Guijarro desniveló la balanza y convirtió a la mallorquina en heroína de una gesta que se había resistido desde 2004.
Guijarro es una de las jugadoras con el futuro más prometedor del fútbol español. La centrocampista se formó en el Collerense y en 2015, cuando tenía 17 años, fichó por el Barcelona, donde destaca gracias a su dirección del juego y despliegue físico. A pesar de su juventud, actúa como una veterana dentro del campo. Guijarro ha sido titular en todos los partidos del Europeo y solo fue sustituida, para perder tiempo, en los instantes finales del partido contra Escocia en la fase de grupos. Pese a que no es una atacante pura, Guijarro ha deslumbrado en en la cita continental por su capacidad ofensiva, marcando en todos los encuentros salvo en el segundo contra Alemania.
La jugadora mallorquina debutó con un gol por la escuadra desde 35 metros en el partido inicial contra Irlanda del Norte, aunque no pudo evitar la derrota contra Alemania en la segunda jornada. España se clasificó para la semifinal (también consiguió el billete para el próximo Mundial sub-20) gracias a un gol de la mallorquina ante Escocia. Contra Holanda, en la semifinal, contribuyó con un gol a la victoria de su equipo. En la gran final lideró en el Windson Park una remontada para la historia. Las francesas, que arrebataron el título a las españolas en la edición anterior, se habían adelantado a los tres minutos de partido, pero Guijarro apareció al cuarto de hora: Paula Fernández sacó un córner y la mallorquina, sin dejar botar el balón, puso la pierna para devolver las tablas al marcador. Francia volvió a marcar y España hizo lo propio para empatar el partido cuando quedaban cinco minutos para que el árbitro pitara el final. El segundo gol de Guijarro en la final fue el premio a la insistencia. Carmen Menayo puso un centro desde la derecha al borde del área pequeña, donde Guijarro se anticipó a la defensa y metió la cabeza para enviar la pelota al fondo de la red.
Al término del partido, la mallorquina tomó una camiseta en la que podía leerse "Suiza 2013, Inglaterra 2013, Costa Rica 2014, Israel 2015 y Eslovaquia 2016", en memoria de los equipos femeninos que se tuvieron que conformar con el subcampeonato en las últimas ediciones. "Quería recordarlas", justificó. "Nos lo merecíamos ya, después de tantos años luchando por este título", abundó la mallorquina, que en el pase a la final del torneo se acordó de Barcelona.
Protagonista de la revancha
Protagonista de la revancha
Trece años es el tiempo transcurrido entre la primera conquista continental del fútbol femenino español en categoría sub-19 y la segunda, articulada el domingo por Guijarro en la final ante la escuadra francesa. En las tres ediciones anteriores, la selección española también había alcanzado la última ronda, pero se volvió de vacío. En 2014 se cruzó en su camino la espigada delantera holandesa Vivianne Miedema (1-0). En 2015 sucumbió ante Suecia (3-1). Y en 2016, el éxito perteneció a Francia (2-1). En esta ocasión, Guijarro ejecutó la revancha.
