Como no podía ser de otra manera Rafel Nadal llegó fresco a la rueda de prensa con pocas ganas de hablar porque había poco que contar. Ha lamentado la retirada por lesión de Pablo Carreño por un problema en el abdominal. "No es la mejor manera de clasificarse porque Pablo es un buen amigo", ha dicho el tenista mallorquín, que ha aplaudido la decisión de su rival de retirarse "porque yo tuve una igual en Montreal en 2009 y te limita mucho. Después jugué el US Open y perdí en semifinales ante Del Potro. Empecé con una rotura de seis milímetros y acabé con 27. Es sobre todo muy limitante en el saque. Lo normal es que no sea muy grande porque ha parado rápido", ha comentado.

A la pregunta de si necesita un partido difícil para conocer su estado real de forma, Nadal ha sido rotundo en su respuesta: "El click lo necesitas cuando vienes jugando con dudas. En Australia sí lo necesitaba porque venía de un periodo de lesiones, pero aquí no he llegado con dudas, llevo seis meses jugando bien. A lo mejor sí es mejor tener un partido difícil, pero a lo mejor no. No se sabe".

Su rival en semifinales el viernes será el austriaco Dominic Thiem, un jugador al que conoce bien porque se ha enfrentado ya tres veces en esta gira de tierra, con dos victorias y una derrota. "Es un jugador con una proyección importante llamado a ganar este torneo, espero que no sea este año. Tengo claro que, o juego muy bien, o estoy fuera del torneo. Tengo que hacerle ver que no juega fácil. Tiene un buen servicio, derecha, volea y un gran potencial para pegar muy fuerte. Hay que jugarle en largo. En Roma no tuve mi mejor día, pero le pegó demasiadas veces en posiciones cómodas", apunta.

Nadal agradece el favoritismo que le llega desde fuera, no solo de los medios de comunicación sino también de los jugadores, el último Roberto Bautista, su víctima en octavos de final, pero ha recordado que, al final, el que juega es él, "Es fantástico. Gracias a la gente que lo dice, pero el que juega soy yo y el nivel lo tengo que dar yo en la pista. Lo que se diga es vuestro trabajo. Llevo muchos años aquí, es difícil ganar y ahora viene lo más complicado", subraya. "He jugado bien todo el torneo. Lo que pueda pasar no se sabe. Mi mejor año aquí fue 2008 y los otros años acabé ganando, pero ahora solo estoy en semifinales", ha señalado, cauto, sobre sus opciones de conquistar su décimo título en París.

Por su parte, Pablo Carreño ha explicado cómo se produjo su lesión. "Con treinta iguales al final del set hice un segundo saque abierto y noté un pinchazo. Me preocupé porque es una zona muy delicada. No podía sacar. Al jugar de fondo no me molestaba nada, pero sacando sí. Sin estar al cien por cien, ante Rafa opté por parar para, si no hay rotura, prevenirla".

El tenista asturiano, de 25 años, que ya entre los veinte mejores del circuito, abandona Roland Garros con sensaciones muy positivas. "Gané a un top 10 como Raonic en un partido con una experiencia nueva para mí, y he ganado a otro jugadorazo como Dimitrov. Espero seguir creciendo", ha concluido.