El Real Madrid y la Juventus, campeones de España y de Italia, respectivamente, pelearán esta noche en el estadio Millennium de Cardiff (Gales) por el título de la Champions, una final que se presenta equilibrada y sin favorito claro, con los de Zinédine Zidane esperando convertirse en los primeros de este formato en reeditar corona y con los de Massimiliano Allegri en busca del triplete y de poner fin a más de dos décadas de espera.

Para conseguir batir a la defensa menos goleada de la competición, Zidane tiene a su disposición a toda su plantilla al completo. Pero unos llegan con mejores cifras que otros. Este es el desglose individual de partidos jugados en Champions, con los minutos desplegados sobre el césped y los goles marcados, de cada uno de los jugadores del Real Madrid.

Keylor Navas (11 partidos, 1.020 minutos, 34 paradas, 16 goles encajados): Llega a la final en su mejor momento, sintiéndose protagonista principal en la semifinal ante el Atlético de Madrid, con paradas salvadoras y dejando en la ida del Santiago Bernabéu su portería a cero por primera vez en toda la competición. Antes recibió goles de equipos de un nivel inferior como Legia o Sporting de Portugal, en momentos en los que no encontraba la regularidad ni su verdadero nivel. En los momentos decisivos apareció con un mano a mano clave ante el Atlético y un recital de paradas en el Calderón.

Kiko Casilla (1 partido, 90 minutos, 3 paradas, 1 gol encajado): Comenzó siendo titular la Liga de Campeones, jugó ante el Sporting de Portugal en el Santiago Bernabéu y ya no volvió a aparecer en la competición, teniendo minutos en Copa del Rey y en algunas jornadas de Liga. En su estreno en la competición más importante del mundo a nivel de clubes dejó tres paradas y encajó un tanto.

Rubén Yáñez (0 partidos, 0 minutos): Como ocurrió en el resto de competiciones su trabajo se limitó a los entrenamientos, con una profesionalidad que elogió Zinedine Zidane para incrementar el nivel de exigencia diario en el trabajo de los dos primeros porteros.

Dani Carvajal (885 minutos, 10 partidos, 0 goles): Se recupera de una lesión muscular para reaparecer en la final de Cardiff. Dueño del lateral derecho, volvió a caer en la maldición de lesionarse ante el Atlético de Madrid, como ya le había ocurrido en dos ocasiones en Liga de Campeones. Se perdió la vuelta de semifinales. Antes fue siempre indiscutible, con una gran labor en banda defensiva y ofensivamente.

Danilo (270 minutos, 3 partidos, 0 goles): Su examen en competición europea llegó en el Vicente Calderón, cuando tuvo que cubrir la baja de Carvajal en la vuelta de semifinales y acabar ganando confianza para el final de temporada, dando la razón a Zidane, que nunca improvisó con un jugador en su lateral y le mantuvo pese a que podía apostar por Nacho.

Pepe (199 minutos, 3 partidos, 0 goles): Encara el que se perfila como último partido de un ciclo de éxito en el Real Madrid, sin sitio en el equipo titular perdiendo el pulso con Varane condicionado por su última lesión por un golpe en las costillas. Puede quedarse incluso en la grada si es uno de los descartes de Zidane. Su papel pasó a ser de secundario, en una campaña marcada por lesiones musculares.

Sergio Ramos (911 minutos, 10 partidos, 1 gol): Héroe en la conquista de la décima y undécima con sus tantos al Atlético de Madrid, tiene en su mano ser el primer jugador que marca en tres finales de la Liga de Campeones. Un gol en el camino a Cardiff, líder de la defensa con un liderazgo que creció en las eliminatorias ante Bayern Múnich y Atlético de Madrid. 95 balones recuperados y seis disparos bloqueados a rivales.

Raphael Varane (810 minutos, 9 partidos, 2 goles): En Liga le afectaron más que en 'Champions' sus lesiones musculares de esta temporada. Tuvo protagonismo continuo como segundo central, adelantando a Pepe en la lucha por la titularidad y sacó provecho de sus incorporaciones al ataque en acciones a balón parado firmando dos tantos. 69 balones recuperados y siete disparos bloqueados son datos que plasman sus virtudes defensivas.

Nacho Fernández (345 minutos, 4 partidos, 0 goles): La importancia que tuvo en Liga, acabando como el defensa que más minutos tuvo y siendo siempre el comodín de Zidane, no tuvo su extensión en Liga de Campeones donde apenas apareció en 4 encuentros. El más importante en la ida de semifinales en el Bernabéu, cuando las molestias de Marcelo le permitieron disfrutar toda la segunda parte ante el Atlético de Madrid, rindiendo en el lateral izquierdo.

Marcelo (911 minutos, 10 partidos, 0 goles): Se quedó en un susto el percance sufrido en la ida de semifinales y pudo jugar la vuelta del Calderón, siendo siempre pieza clave en el esquema de Zidane con sus incorporaciones ofensivas que le convierten en el lateral más asistente. Preparado para su duelo con Dani Alves, en la que será su tercera final de 'Champions', buscando el pleno de triunfos y siendo el mejor lateral izquierdo del mundo.

Fabio Coentrao (96 minutos, 2 partidos, 0 goles): En su última Liga de Campeones con el Real Madrid, su papel fue testimonial y hasta a punto estuvo de poner en riesgo la fase de grupos. Cuando el Real Madrid necesitaba ganar en Lisboa al Sporting de Portugal, tras ceder un empate en la visita al Legia, saltó al campo por lesión de Marcelo y cometió un penalti a diez minutos del final. Llegó a confesar posteriormente que no estaba preparado psicológicamente para defender la camiseta del Real Madrid y encarar la responsabilidad.

Toni Kroos (938 minutos, 11 partidos, 1 gol, 2 asistencias): Hasta 113 kilómetros ha recorrido en la competición un hombre clave en la columna vertebral de Zidane. Con las espaldas cubiertas por Casemiro, se incorporó con mayor libertad al ataque para marcar un tanto y repartir dos asistencias. Un 93% en el pase muestra la fiabilidad alemana al servicio de sus compañeros. 764 buenos de 810 realizados. Clave, como siempre, con su golpeo en los saques de esquina. Vivió el regreso a la que fue su casa para conquistar el Allianz Arena de Múnich.

Casemiro (737 minutos, 8 partidos, 1 gol, 2 asistencias): Se perdió cuatro partidos en el camino a Cardiff y el Real Madrid notó la pérdida de equilibrio sin el brasileño en el campo. Rozó la expulsión ante el Bayern Múnich y el Atlético de Madrid, en partidos duros en los que emergió su figura en la batalla del centro del campo. Tendrá un papel clave en la final, con un ojo a la movilidad de Dybala, a las coberturas a sus laterales, mientras aporta músculo en su pulso con Khedira.

Luka Modric (893 minutos, 10 partidos, 0 goles, 0 asistencias): Pese a no aparecer en área rival en toda la competición, en la que ni marcó ni asistió, es el faro que iluminó el fútbol madridista, especialmente brillante en la semifinal ante el Atlético de Madrid. 99,2 kilómetros recorridos y un 90% de acierto en el pase más 43 balones recuperados. Tendrá la responsabilidad de romper líneas unidas del Juventus en la final.

Mateo Kovacic (219 minutos, 6 partidos, 1 gol, 0 asistencias): No tuvo oportunidades como titular pero siempre rindió cuando Zidane le introdujo en el campo, siendo uno de los cambios habituales para dar movilidad al centro del campo en sus ya clásicas carreras con el balón cosido. Fue el jugador con mayor índice de acierto en el pase, con un 97% en 197 completados de 202 realizados.

Isco Alarcón (304 minutos, 5 partidos, 1 gol, 0 asistencias): No contó para Zidane hasta los momentos decisivos de la competición. Su importancia en Liga no la trasladaba a la Champions, donde apenas recibió minutos en la fase de grupos. Cuando tuvo continuidad mostró su magia y acabó recogiendo el premio del gol decisivo que frenó el intento de remontada atlética en el Calderón. Se perfila titular en la gran final, con una libertad en la media punta que debe aprovechar para descolocar la trabajada defensa italiana.

James Rodríguez (318 minutos, 6 partidos, 0 goles, 2 asistencias): Como ocurrió en el resto de competiciones importantes que disputó el Real Madrid, el colombiano no tuvo la continuidad necesaria para mostrar sus facultades. Jugó en la mitad de los partidos del torneo dejando dos pases de gol, movilidad y ganas de brillar. La cita de Cardiff se perfila como su despedida y puede que no esté ni en el banquillo.

Marco Asensio (247 minutos, 7 partidos, 2 goles, 1 asistencia): Integrante de esa segunda línea que tan bien ha rendido esta temporada con la confianza de Zidane, siempre fue apuesta del técnico en una competición en la que participó en siete de los doce encuentros disputados, explotó su llegada con dos tantos y asistió en una ocasión. Año de crecimiento en su camino a ser estrella mundial.

Lucas Vázquez (366 minutos, 10 partidos, 1 gol, 1 asistencia): Cambio habitual de Zidane, con mucha participación en la competición pero pocos minutos en los que siempre ejerció un papel de revulsivo. 53 kilómetros en 366 minutos muestran su desgaste en ayudas defensivas y su misión en ataque, siempre encarando rivales y apurando línea de fondo en sus acciones de extremo.

Gareth Bale (496 minutos, 7 partidos, 2 goles, 2 asistencias): Las lesiones, primero su operación de tobillo, y posteriormente en los sóleos, rebajaron el protagonismo que le esperaba en la edición de 'Champions' más especial para él, al jugarse la final en su ciudad natal. Llega justo a tiempo a Cardiff, recién recuperado y sin ritmo de competición, para tener minutos pero pinta que saliendo desde el banquillo. Fue el que tiró del carro en los primeros pasos del torneo.

Cristiano Ronaldo (1.110 minutos, 12 partidos, 10 goles, 6 asistencias): El jugador con más minutos en una Liga de Campeones que comenzó rebajando su pegada habitual en la fase de grupos, en la que pasó a ser más asistente, pero que decidió en las eliminatorias grandes. Cinco tantos al Bayern en cuartos, tres al Atlético en semifinales. Puede acabar siendo por quinta temporada consecutiva máximo goleador si marca en la final. Sería la tercera en lo que hace, firmando otro récord a su largo historial. Firma 14 goles en sus nueve últimos partidos en el mejor final de campaña que se le recuerda gracias al descanso que tuvo en Liga. Diez dianas en la 'Champions' que más pases de gol dio, hasta seis.

Karim Benzema (877 minutos, 12 partidos, 5 goles, 2 asistencias): Mantiene su idilio goleador con la competición en la que mejor promedio muestra entre minutos y tantos. Participó en todos los partidos de la presente edición, con cinco tantos y dos asistencias. No le hizo falta marcar para dejar una acción clave en el pase a la final que será recordada por siempre en el club. Vuelta de semifinales, cuando el Atlético rozaba la remontada tras comenzar marcando dos goles, se fue de tres rivales en un palmo, pegado a línea de fondo, y de un saque de banda inventó una acción de genio que acabó en gol de Isco y la sentencia. 35 disparos y 85 por ciento de acierto en los pases más difíciles, en los últimos metros.

Álvaro Morata (164 minutos, 8 partidos, 3 goles, 1 asistencia): Cuatro disparos y tres goles muestran su eficacia cada vez que recibió una oportunidad de Zidane. Morata quiere poner su granito de arena para devolver lo que quitó cuando defendía al Juventus y marcó dos tantos para eliminar al Real Madrid. Sin continuidad, siempre que apareció tuvo protagonismo.

Mariano (0 minutos, 0 partidos): No se estrenó en Liga de Campeones, única competición en la que no tuvo ningún minuto de Zidane, para mostrar su hambre y poder dejar su huella goleadora.