José Joaquín Moreno -Josico- no quiere dejar pasar el tren al que se ha subido. A diferencia de su antecesor, Christian Ziege, deberá ganarse, no por nombre ni por currículo deportivo, su continuidad en el Atlético Baleares. Deberá hacerlo con el trabajo diario, los resultados del fin de semana y con el hambre de fútbol que muestren los que ahora son sus futbolistas hasta final de temporada. Un detalle, este último, en el que se fija mucho el actual propietario del club, Ingo Volckmann.

Josico lo sabe, y no tuvo inconveniente alguno en reconocerlo ayer en su presentación: "Al reunirme con Patrick Messow, le dije que lo que yo pretendía era que el club me viera trabajar. Si ellos me ven, y están convencidos de que soy el hombre en el cual el presidente va a confiar para subir a este equipo? si me hacen caso y vamos de la mano, allá vamos". "El objetivo es en estos nueve partidos sacar el máximo rendimiento a la plantilla, que se amolde el equipo a mi manera de ser, y luego habrá tiempo de trabajar", indicó.

Un órdago del que espera salir triunfal quien entiende que, por plantilla, el Baleares debería estar mucho más arriba en la clasificación. "El proyecto lleva dos años apostando fuerte y uno desde fuera, viendo la plantilla, no entiende por lo menos cómo no está en posición de play-off y optar al ascenso, que es la meta por la que está apostando el presidente".

Lejos de marcarse metas como "obtener una plaza para la Copa del Rey", el técnico manchego reconoce que ahora sus pensamientos "no van más allá del partido ante el Lleida de este domingo. Todo está lejos, pero se va a abrir el camino con victorias y ya veremos al final para lo que nos da".

"Un lugar ideal"

"Soy un hombre de fútbol, quiero entrenar y el proyecto deportivo de aquí es bueno. Veo un proyecto viable, un club saneado con ganas de crecer. Soy un entrenador que está empezando, aunque ya tenga mi pequeña trayectoria. Y para mí es un lugar ideal para explotar como entrenador", aseveró.

Su libro de estilo viene circunscrito al término "trabajo". "Vengo aquí a hacer un trabajo para que el equipo sea reconocido, que luche de principio a fin, que se deje la piel en el campo. Cuanto más se trabaje, más suerte habrá. Ese es mi lema", explicó.

Sobre el campo, se plasmará un 4-4-2, aunque Josico lo matizó: "Al ir conociendo a los jugadores, podremos utilizar variantes. La defensa de 4 está clara, pero según las características de ciertos jugadores, muchas veces te condicionan tu forma de jugar". "El domingo es pronto para que se vea lo que yo quiero. Voy a dar pocas cosas. Solo puedo motivar, convencer a los jugadores y poner a los que vea mejor. Con el tiempo, espero que se vea un Baleares diferente", dijo.

Por último, alabó la calidad del vestuario que se ha encontrado: "Receptivo y con muchas ganas". "Es una plantilla de calidad, pero algo corta para mi gusto" ,destacó Josico, que cerró su intervención con un claro mensaje al propietario del club, Ingo Volckmann: "El presidente lleva dos años apostando fuerte. Y creo que puedo ser el hombre que le ayude a conseguir lo que pretende".