´Son Pardo Beach´ o ´Son Pardo sur Mer´. Cualquiera de esos nombres se ajusta a la perfección para definir el desigual y excesivamente pesado estado, muy lejos de compactar -como una playa-, que presentó ayer la pista del hipódromo del Consell de Mallorca. Fruto del último experimento desarrollado sobre ella por el ingeniero Joan Artigues. Una seria amenaza para la salud de los caballos que compiten sobre ella, que ya quedó en evidencia el miércoles, día de entrenamientos.

Una serie de deficiencias que provocó la unánime crítica y el rechazo de la gran mayoría de propietarios y entrenadores con caballos en competición en la reunión Premium que registró la "inesperada" victoria (54/1) de Vastervik Jazz, con Jaume Fluxá, en la estelar de la cita, la XXXIII edición del´Gran Premi Govern de les Illes Balears´. Una clásica resuelta a un promedio de 1:17´4 minutos, sobre 2.150 metros. Una de las peores marcas de su palmarés, con la primera más lenta remontándose al 1:17´6 de Diluvi en el 2004. "Está demasiado pesada", admitió Jaume Fluxá, pese a ser el principal beneficiado del desastre.

Un nuevo y evidente despropósito, producto de la obra de renovación y reposición de arena sobre el piso de la pista de 1.000 metros de cuerda, organizado por el Institut de l´Esport Hípic del Consell de Mallorca, con un presupuesto de unos 80.000 euros.

El enésimo fracaso de Artigues y los políticos de turno de la institución insular desde que en el 2011 decidieron apostar por el sílice como material dominante. Eso sí, el ingeniero en su valoración restó trascendencia al "desastre" y cifró solo "en un cinco por ciento" la superficie a corregir, negando la evidencia de que la pista esté excesivamente pesada: "Es una situación producto del cambio muy radical de material".

La opinión del técnico poco o nada tuvo que ver con la multitud de valoraciones muy en negativo que recibió su obra. "Con el titular de que es una chapuza os quedásteis muy cortos", aseguró Tomeu Fuster, conductor del francés Quatal des Ormeaux. Uno de los mejores y más regulares del meeting Premium, después de que su caballo terminase "deshecho" y el último, rodando por encima de la barrera de 1:20 minutos, cuando es un habitual del 1:16.

Ramses des Charmes Dominó de punta a punta el ´Illes Balears´

El francés Ramses des Charmes, con Joan Bauzá, dominó de punta a punta la segunda prueba de prestigio de la matinal del Hipòdrom Son Pardo, resuelta a un discreto promedio de 1:16´2 minutos. El vencedor rodó durante la mayor parte del recorrido escoltado por el favorito, Uno la Chesnaie, segundo en meta, con Miquel Mestre a sus riendas. Y en tercera posición concluyó Ritz du Boccage, dirigido por Jaume Fluxá.