Un ciclista en forma -y de clase- es siempre una garantía y más si está arropado por un gran equipo, como es el caso del Lotto-Soudal. Ese es el caso del belga Tim Wellens, de 25 años, ganador hoy del Trofeu Andratx en la subida, y el final en alto, del Mirador des Colomer, en Formentor. El mismo que en la jornada anterior ganó en Deià, en solitario, bajo un diluvio y tras 30 kilómetros escapado en cabeza de carrera.

Una segunda victoria consecutiva de Tim Wellens en la XXVI Challenge Volta a Mallorca coincidiendo con su tercera prueba, y el tercer éxito que se apuntan en tres días de competición corredores del conjunto belga que en la isla dirige Bart Leysen.

Para eso, tras unos 160 kilómetros de recorrido por carreteras de la Serra de Tramuntana, Tim Wellens ha cruzado en solitario la línea de meta de Es Colomer, con unos escasos segundos de ventaja sobre Alejandro Valverde, mientras que en tercera posición terminaba otro corredor del Lotto-Soudal. En este caso otro belga, Louis Vervaeke, segundo clasificado el viernes en la meta de Deià.

Tras coronarse el Puig Major fue cuando realmente empezó la carrera. Especialmente cuando a falta de 20 kilómetros para la meta de Formentor atacaron dos ciclistas del Team Sky, el británico Jonathan Dibben y el alemán Christian Knees, convirtiéndose en cabeza de carrera. Una pareja que entró en los últimos 10 kilómetros del trofeo con una ventaja de 28 segundos sobre un pequeño grupo del que tiraban hombres del Movistar. Y su empeño permitió neutralizar a los dos hombres del Sky a 5 kilómetros de meta.

Previamente, en la tempranera fuga inicial que marcó el desarrollo -y el ritmo- de la carrera quien entró en la escapada fue el mallorquín Josep Miralles, en su segunda carrera con el Amore & Vita italiano. El palmesano asumió protagonismo en la fuga en la que entraron once corredores, entre ellos también el español Diego Milán, jefe de filas del Inteja dominicano. Ambos coronaron primero y segundo bajo la pnacarta de puerto puntuable de Galilea, con Sebastián Mora en tercera posición.

El mallorquín Josep Miralles

Sin embargo, superado el kilómetro 61 -en el tramo entre Galilea y Esporles- Josep Miralles sufrió la primera de las tres averías mecánica que le lastraron en la segunda parte de la carrera. Una primera incidencia que le condenó a descolgarse del grupo de cabeza y tras una intensa persecución se reintegró a la punta de carrera, antes de que la escapada fuese finalmente neutralizada en su aproximación al Puig Major.

Eso sí, sobre el kilómetro 73, en el ecuador de la carrera, camino de Deià, la fuga llegó a contar con hasta cuatro minutos y medio de ventaja. Una situación que llevó al Movistar Team a asumir la responsabilidad de tirar del grupo perseguidor, en un claro adelanto de sus intenciones de intentar ganar la prueba con Alejandro Valverde. Un objetivo que frustró la clase y el gran momento de forma de Tim Wellens.