Con menos comodidad de la prevista vivió ayer el Can Ventura Palma su visita al colista Electrocash Cáceres, en partido correspondiente a la jornada 12 de la Superliga Masculina de voleibol. El 1-3 del marcador refleja la superioridad de los pupilos de Marcos Dreyer, que sin embargo no supieron cerrar el partido con 0-2 y acabaron hasta cediendo un set ante un rival netamente inferior.

El Can Ventura compareció en el Pabellón Multiusos Ciudad de Cáceres con el claro objetivo de solventar el encuentro con cierta tranquilidad. La ausencia del receptor internacional Fran Ruiz, baja por un esguince de tobillo, no fue impedimento para que los mallorquines hicieran valer su mejor juego y, sobre todo, su autoridad en la red.

El encuentro arrancó con un Cáceres ilusionado en hacer frente al Can Ventura, tercer clasificado y que llegaba con el objetivo de resarcirse del tropiezo sufrido en la anterior jornada en la pista del Barcelona (3-1), derrota que les apeó de la semifinal -deberán jugar los cuartos- de la Copa del Rey. Tras un inicio titubeante e igualado (9-9), se despegó el conjunto palmesano en el marcador (del 9-13 al 14-20) con la aportación ofensiva de Jorge Fernández, Villena, Hage y un Cairus que había salido de inicio.

Tras cerrar el primer set con un claro 16-25, el segundo parcial fue casi calcado: tras el 7-7 se inició el despeque del Can Ventura, que del 9-12 se escapó a un ya definitivo 11-22 para cerrar la manga en un contundente 13-25.

El tercer set, local

En el tercer set, pese a que parecía que el Cáceres había arrojado la toalla, los locales no le perdieron la cara al encuentro y supieron aguantar en el marcador a un Can Ventura que no supo cerrar el duelo tras la entrada de jugadores menos habituales en las rotaciones, a los que Marcos Dreyer quiso dar minutos de rodaje. El Palma perdió ritmo de juego y acabó cediendo, pese al regreso de Villena y Macarro (26-24).

En el último y definitivo set, el Can Ventura intentó darle velocidad y potencia a su juego, transcurriendo la manga con una ligera ventaja de 5 puntos a favor de los palmesanos, que se plantaron con un 12-18 que resultó definitivo para desanimar a un Cáceres que ya había hecho sus deberes -plantar cara y arrebatarle un set a un candidato al título-, cerrando el encuentro con un 14-25 final.