Arranca el 2017 para el Atlético Baleares con un partido ideal para iniciar la remontada (12:00 horas y en Son Malferit). El Atlético Levante de José Carlos Granero, equipo encallado en la zona de descenso y que recientemente ha prescindido de uno de sus mejores efectivos, Sergio Nanclares, parece a priori el rival adecuado para que los blanquiazules comiencen a sumar de tres en tres.

Para este encuentro, Christian Ziege podrá contar con la presencia de su centrocampista Kike López, ausente los últimos cinco partidos de Liga debido a un molesto ataque de apendicitis, lo que le obligó a pasar por el quirófano el pasado 19 de noviembre. Superada dicha incidencia, el Baleares podrá contar de nuevo con su habitual puñal en banda derecha, al que bien podría acompañar el hasta ahora único refuerzo del mercado invernal, el lucense Julio Delgado.

De quien aún no se tiene noticias es del delantero Chando Torres, que una semana más está fuera de una convocatoria. En la misma situación se encuentran para el partido de hoy Joan Vich, fuera de combate por un proceso gripal, así como Manu Farrando (expulsado en Alcoi) y David Sánchez.

El salmantino Kike López no se fía del rival de hoy, penúltimo clasificado del grupo tercero y que solo ha sumado tres de los últimos 18 puntos en disputa -todos ellos como local- y al que valora "muy complicado porque cuando están abajo, los contrarios suelen empujar mucho por la necesidad que tienen". El delantero espera poder "regalar una victoria por los Reyes de Oriente, a la afición y empezar bien el 2017". Falta que hace al equipo de Ziege.