El astillero Spirit Yachts nació en 1993 como respuesta a la demanda de armadores amantes de la vela clásica que no renuncian a las prestaciones y comodidades que puede ofrecer un barco moderno. Sus diseños evocan los veleros de recreo de la segunda mitad del siglo XX y responden a la descripción técnica de la clase Espíritu de Tradición de las regatas de barcos clásicos y de época del calendario mediterráneo.

La marca, que se encuentra radicada en Suffolk (Inglaterra), se hizo famosa en el mundo entero al recibir el encargo de construir el velero de James Bond para la película Casino Royale (2008). El Soufreìre, de 17 metros de eslora y 8 toneladas de desplazamiento, fue el primer barco autorizado en 300 años a navegar por los canales de Venecia.

Cuatro espectaculares barcos surgidos de la factoría de Spirit Yachts se reúnen estos días en el Real Club Náutico de Palma (RCNP) para disputar la que, a pesar de los 23 años de historia del astillero, será su primera competición oficial. "Ya han participado en otras regatas de clásicos, dentro de la categoría de Espíritu de Tradición, pero esta será la primera vez que se enfrenten entre ellos. La idea es que la Spirit Cup se celebre cada año y cuente a partir de la temporada que viene con más de diez participantes", explica Vivi Mainemare, coordinadora deportiva del RCNP.

La flota de la I Spirit Cup está formada por los veleros Chloe, Happy Forever, Legolas y Zalgul. Sus esloras van de los 14 a los 24 metros y la competición se desarrollará bajo la fórmula internacional de compensación de tiempos IRC.

La organización ha programado una regata costera diaria en la Bahía de Palma desde hoy hasta el domingo. Spirit Yacht ha decidido apostar fuerte por esta regata y para ello ha buscado un trofeo icónico y con solera. El ganador alzará una copa que data de 1936.