Álex Abrines publicó ayer en diferentes redes sociales un comunicado en el que se despide de la afición del Barcelona y explica los motivos que le han llevado a aceptar la propuesta de Oklahoma City Thunder pese a que había prometido quedarse en la entidad blaugrana al menos esta temporada.

El alero mallorquín, que ha puesto fin a una etapa de cuatro años como jugador del Barcelona, hizo oficial su adiós con estas palabras: "Os escribo para despedirme. Hoy [por ayer] no es un día fácil para mí. Me despido de un club [FC Barcelona] que me lo ha dado todo, que me ha hecho crecer como jugador y madurar como persona. Os puedo asegurar que la de marcharme no ha sido una decisión fácil, pero en esta ocasión he decidido dar el paso y marcharme a un equipo que no solo me ha hecho una gran oferta sino que también me ha propuesto un gran proyecto deportivo".

Abrines agradeció "al club, a todos los que trabajan y hacen todo posible". "Gracias a mis compañeros y a Xavi. Gracias también a los Dracs, Penya Meritxell y Sang Culé Cor Catalá. Y por supuesto gracias a la afición que me ha dado siempre, cada día, su apoyo", publicó el mallorquín.

El alero admitió que "hace semanas" aseguró que continuaría un año más en Barcelona, "pero las circunstancias y el proyecto que me ofrecen han cambiado y no podía decir que no". "La NBA siempre ha sido un sueño y aún hoy, cuando ya he firmado mi contrato, no me puedo creer que vaya a jugar en la mejor liga del mundo", declaró el mallorquín ante su nueva aventura en Estados Unidos.