Rafel Nadal fue contundente ayer durante la presentación de su museo interactivo en Manacor. "Es imposible que llegue al cien por cien de competitividad, sobre todo en individuales, a los Juegos de Río", resaltó. El mallorquín, que hace unos días anunció su ausencia en el torneo de Toronto por su problema en una muñeca, aseguró que el hecho de no ir a Canadá es un contratiempo para su preparación, ya que si hubiera ido su "puesta a punto para los Juegos Olímpicos hubiera sido mejor". Aún así, el manacorí tiene las prioridades claras. "Los tiempos son los tiempos, no voy a hacer nada que me perjudique para Río", afirmó.

Además, su ausencia en Toronto significa que su partido de regreso a los Juegos será el primero desde su abandono en Roland Garros. "Después de estar dos meses sin competir, y sin entrenar prácticamente, estar al máximo nivel va a ser muy complicado", señaló Nadal. Aún así, quiso ser optimista: "Nadie sabe lo que puede pasar después", refiriéndose al nivel que pueda ofrecer.

Nadal tiene claro su principal reto: no seguir lesionado. "El día que salga hacia Río quiero intentar estar recuperado", afirmó el tenista. "La semana que viene hay previa y quiero esforzarme al máximo y morirme en cada entrenamiento", dijo.

Nadal tiene tan claro su objetivo que prefirió no garantizar su presencia en los Juegos: "No hay nada seguro en esta vida". Aunque, para no alarmar, dijo que "los tiempos (de su recuperación) son correctos", por lo que, a priori, no hay nada que temer.

Su preparación tal vez no sea la ideal, pero aclaró que su rendimiento en los entrenamientos está "mejor que hace dos semanas". Pese a esta mejora, el isleño aseguró que no se ve capaz de entrenar con Andy Murray. El británico llegó ayer a la isla para preparar su puesta a punto para los Juegos, pero los próximos días no se ejercitará junto a Nadal. "No estoy preparado para entrenar al nivel de (Andy) Murray; tengo que ir paso a paso", explicó.

Nadal, a parte de la prueba individual, también jugará los dobles masculinos (junto a Marc López) y los dobles mixtos (con Garbiñe Muguruza). Según contó el propio tenista, será la primera vez que juegue en esta categoría y no sabe, aún, cómo preparará esta prueba que compartirá con la reciente ganadora del Roland Garros, la hispano-venezolana Muguruza. "No sé cómo se preparan los dobles mixtos. Será la primera vez en mi vida que los juegue, pero tenis es tenis", afirmó.

Nadal también hizo referencia a la polémica sobre dopaje que envuelve a Rusia, que podría quedar fuera de Río: "Los tramposos tienen que ser sancionados, y si hacen trampas voluntariamente, aún más". Pero también consideró "injusto" que se castigue a deportistas inocentes. "Seguro que muchos de los rusos no han hecho nada ilegal", señaló. El tenista no se quiso mojar más sobre el tema, ya que no lo conocía a la perfección y no tenía una opinión formada al respecto.

"Un aliciente más"

El mallorquín será, además, el abanderado de España en la inauguración de los Juegos. Considera que este hecho es un "aliciente más" para recuperarse y ofrecer un buen nivel en Río. El tenista manacorí aseguró sentirse "muy ilusionado" con este privilegio. "Es un reconocimiento muy especial para mi carrerra", dijo satisfecho.

Será la primera vez que Nadal sea abanderado, después de no haberlo podido ser en los últimos Juegos Olímpicos de Londres en el 2012 por culpa de una lesión que le obligó a renunciar.