­"He tenido mucho miedo, he llorado", confesaba ayer Dami Edibson a su regresó a la isla después de haber vivido el susto de su vida. La mallorquina, de 13 años, se encontraba disputando con la selección española el Europeo de su categoría ante la anfitriona Turquía justo cuando se produjo el terrible atentado en el aeropuerto de Atatürk de Estambul, que provocó la muerte de 41 personas, y en el que debía estar a esa misma hora si sus duelos no se hubieran alargado. "No cerré mi partido cuando íbamos 4-1, empecé a fallar y al final lo pude salvar con 7-5. Y después todavía tenía los dobles, que se decidió por el súper ´tie-break´, por lo que nos quedamos sin tiempo para coger el avión que nos tenía que llevar desde Mersin -ciudad en la que se disputaban los partidos- hasta Estambul", explicó visiblemente aliviada.

Sin embargo, la isleña reconoció los momentos de angustia que pasó desde que se enteraron de la trágica noticia: "A una compañera le llama su abuelo y le dice que ha habido un atendado en Estambul y en ese momento no nos lo creemos mucho. Justo nos vamos corriendo a la habitación de nuestra entrenadora y vemos en internet y por televisión que es verdad. En ese momento intenté hablar con mi padre, pero no lo conseguí hasta un rato después".

Dami recuerda los nervios que había en su hotel. "Hubo una reunión y nos dijeron que teníamos dos opciones, o irnos a Chipre en barco o coger un vuelo que nos debía llevar al aeropuerto de Adana -a 60 kilómetros de Mersin- para después coger otro desde Estambul. Al final fuimos a Adana con un bus rodeado de policías y volamos al aeropuerto donde se había producido el atentado. Allí estuvimos cinco horas y tuvimos mucho miedo porque pensábamos que los terroristas podrían volver a poner una bomba", narró con madurez la adolescente, que llegó a desconfiar de cualquiera durante ese tiempo en Atatürk. "Mirábamos a alguien y ya pensábamos que tenía una pistola", subraya tras vivir una experiencia inolvidable y que finalizó ayer cuando pisó la isla.