La mallorquina Nuria Iturrios sigue disfrutando del enorme éxito que le supuso conquistar hace unas semanas el Lalla Merien Cup-Open de Marruecos. "Sabía que entrenando como lo estoy haciendo y con las ganas que le pongo, alguno tenía que caer", dijo ayer antes de empezar su participación en la segunda prueba del Santander Tour que se disputa en el Club Zaudín Golf de Sevilla, donde parte como una de las favoritas para adjudicarse el trofeo. De hecho, ya se puso líder al entregar un primer parcial de 65 golpes, 6 bajo el par del campo y dos de ventaja sobre el trío formado por Carolina González, Marta Silva y Noemí Jiménez.

La clave de su victoria en el Royal Golf Dar Es Salam de Rabat estuvo precisamente "en el putt y en contar con el apoyo de ´Chiqui´", su entrenador desde que tenía siete años, que le hizo de caddie. "Jugué muy relajada junto a él, con quien tengo mucha confianza porque es como si fuera de la familia. Iba con cero nervios y disfrutando mucho pese a la lluvia. Estaba en mi burbuja", asegura satisfecha. "En los nueve primeros hoyos fallé un putt de medio metro pero jugué muy bien, salió todo rodado y entraron los putts; la verdad es que el putt funcionó toda la semana. Disfruté mucho y jugué como a mí me gusta hacerlo", añade convencida.

La palmesana reconoce que el triunfo en Marruecos le ha proporcionado un salto de calidad, sobre todo a nivel anímico. "Hemos podido dar un gran paso respecto al calendario y a las expectativas pero, sobre todo, una alegría. La mentalidad es ahora distinta y voy mucho más tranquila", reflexiona. El título del Lalla Merien Cup-Open de Marruecos le ha reportado tres años de exención incluyendo esta temporada, convirtiéndose en jugadora de pleno derecho del Circuito Europeo hasta finales del 2018, además de clasificarse automáticamente para disputar el Open Británico y el Evian Championship, los dos Grandes europeos en los que ´Chiqui´ le hará de caddie. "Estoy centrada en el LET y mi objetivo es ser la ´rookie´ del año; la siguiente meta€ conseguir jugar en la LPGA. Quiero ser la número uno del mundo", explica visiblemente ilusionada, por difícil que parezca el reto. Tras su éxito "se colapsó" el teléfono móvil debido a la cantidad de mensajes que recibió dándole la enhorabuena al lograr la victoria. Entre todos, hubo uno que le hizo especial ilusión: "¡Un tweet de Gary Player! Me enteré por Azahara Muñoz y no me lo podía creer. Fue un honor", confiesa.

Iturrios, de apenas veinte años, cogió su primer palo de golf a los cinco años en Son Servera, donde su padre ejercía las labores de ´greenkeeper´, y a los siete recibió sus primeras clases impartidas por el profesional del Club José Luis Palacios, ´Chiqui´, testigo del triunfo de su pupila en el Ladies European Tour.

En septiembre del 2015, a la semana de hacerse profesional, una pancreatitis la dejó fuera de juego durante un mes, lo que no fue obstáculo para que en noviembre accediese al Tour Europeo merced al cuarto puesto en la final de la Escuela Clasificatoria.

Esta semana se mantiene enfocada en el Santander Tour, "una gran oportunidad para el golf femenino español y europeo. Las amigas con las que lo he hablado están súper agradecidas. Este circuito nos ayuda mucho y sirve para rodarnos, ojalá siga muchos años. Tengo muy buenos recuerdos del Banesto Tour 2012 en el Centro Nacional, donde tuve la oportunidad de jugar con las profesionales y aprendí mucho", comenta.

A sus compañeras que dan el paso al profesionalismo les manda un mensaje. "Que disfruten de lo que hacen y no tengan prisa, las cosas llegan si se hacen bien. Hay que entrenar mucho y sin expectativas, los objetivos se consiguen con el trabajo día a día. En este deporte hay que tener mucha paciencia", explica. Admite que su mejor herramienta antes era "el Drive y la peor el putt, aunque ahora el putt ha ganado protagonismo. Los hierros se pueden mejorar", admitió.

Le gustan todos los deportes, sobre todo el fútbol, declarándose seguidora del Barça. Admira a Messi -"por su habilidad; como dice el refrán, pequeño pero matón" y también al manacorí Rafel Nadal -"por su fuerza mental"-, con quien le gustaría compartir 18 hoyos puesto que juega en su club, en Son Servera. Laura Davies y Seve Ballesteros son sus modelos "por el espectáculo que siempre daban; me gusta el golf imaginativo, el de las coreanas es un poquito aburrido", destaca.

Le encanta entrenar con los niños de su Club y siempre quiere ganar. "Es que soy muy competitiva, no me gusta perder", reconoce. Es integrante del ProSpain Team y, aunque su carrera profesional no ha hecho más que empezar, ya cuenta con el apoyo de muchas marcas. "Sé que si sigo trabajando y entrenando muy bien, y a la vez disfrutando, las cosas tienen que salir", concluye. Palabra de campeona.