"Queremos una pista, queremos una pista", fue el lema que resonó ayer por la tarde en la Plaça de Cort, frente a la sede del Ajuntamente de Palma. Fruto de una manifestación con la que quedó claro que el clamor popular ya alcanza niveles de indignación y que se deja oir en la calle como un sentir ya muy importante.
Y es que la marginación del atletismo en Palma es un hecho innegable e histórico. Especialmente en lo relacionado al déficit de instalaciones municipales y después de que en 1999 se llegó a contar con cinco pistas de atletismo de titularidad pública y que hoy ninguna de ellas esté en funcionamiento, abierta al público o en buenas condiciones, según desveló Diario de Mallorca en octubre del año pasado.
Lo prueba también que Palma es actualmente la única capital de comunidad sin tartán propio en toda España, como viene denunciando desde octubre la plataforma de clubes de atletismo de Palma, con 12 entidades asociadas.
"Sufrimos una situación inadmisible, de evidente discriminación a nivel de instalaciones frente a la mayoría de deportes", lamentó el veterano Emilio de la Cámará. Personaje emblemático del atletismo mallorquín y múltiple campeón del mundo en pruebas de fondo para los más veteranos.
Ante todo eso y la dificultad añadida del cierre del añillo del Príncipes de España, desde agosto, los atletas federados manifestaron públicamente ante Cort su malestar, plantearon sus reivindicaciones y la reclamación de una pista de titularidad municipal.
Unos 300 deportistas, muchos de ellos menores, reclamaron por espacio de hora y media la habilitación en Palma de una pista de atletismo de titularidad municipal, para cubrir las necesidades de los más de 2.000 atletas federados con residencia en Ciutat. Con la mayoría de ellos condenados desde hace más de seis meses a entrenar por las calles, parques y plazas de la urbe. Eso sí, al que no se vio en la manifestación fue al presidente de la Federació Balear d'Atletisme, Biel Gili.
A lo largo de la jornada de ayer, a la iniciativa popular y reivindicación de los atletas se sumaron peticiones de dos grupos políticos con representación en el Ajuntament de Palma. Primero fue el Pi, que a través de un comunicado indicó que reclamará a Cort que se inicie la construcción del proyecto de pista, de 400 metros, proyectado en terrenos de Sant Ferran. Lamentando que los atletas deban entrenar en espacios no deportivos, desde el Pi se aseguró: "El consorcio entre Ajuntament de Palma, Consell de Mallorca y Govern Balear tiene en sus manos solventar un problema histórico, pero se encuentra en punto muerto". Por su parte, el grupo de Ciutadans en Cort, con Josep Lluís Bauzá al frente, plantea una proposición que reza: "La firma de un convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Palma y el Govern para el uso de las pistas de atletismo del Polideportivo Príncipes de España".
