El entrenador del FC Barcelona, Luis Enrique Martínez, ha asegurado que "solo" hace falta que tanto el brasileño Neymar como el argentino Leo Messi estén "al 99%" para que puedan disputar la final del Mundial de Clubes de este domingo ante River Plate (11.30 horas/Telecinco), y ha afirmado que es optimista respecto al estado de la 'Pulga'.

"Les veo bien, mejorando los dos. Ya veremos si mañana están al cien por cien para poder jugar, solo hace falta que estén al 99%", declaró en la rueda de prensa previa, en la que reconoció que es "optimista" con respecto al estado del argentino, que sufrió un cólico nefrítico que le impidió jugar la semifinal ante el Guangzhou Evergrande (3-0), y que todavía faltan "muchas horas" para decidir si participará.

Por otra parte, el técnico prevé "una final muy atractiva" ante el conjunto argentino, que cuenta con "un gran potencial", aunque cree que no llegan más motivados que los azulgrana. "Todas las situaciones de una final tienen dos lecturas. Una es que les convierte en más peligrosos y otra que te puede condicionar y presionar. Llegamos los dos favoritos pero ya hemos visto en las semifinales que las sorpresas pueden estar a la orden del día. Es un partido para disfrutar", indicó.

En este sentido, advirtió de que a los 'Millonarios' les gusta "presionar alto" y tener el balón y que deben ser cautelosos. "Va a salir a jugar al fútbol. No va a distar mucho de lo que es un rival de la Liga española o de Europa. River destaca por ser un bloque", manifestó, aunque destacó a "Sánchez, Mora, Alario o Kranevitter" sin olvidarse del exbarcelonista Javier Saviola.

Sobre el factor ambiental, el entrenador culé afirmó que "cuanto más ruido haya durante el partido, mejor". "No sé si pareceremos locales o no. Sé que River Plate ha traído a muchos seguidores. Cuanto más ambiente haya, más bonito para los futbolistas", indicó sobre el hecho de que pueda haber más seguidores argentinos que barcelonistas.

Por último, agradeció el apoyo de los aficionados japoneses durante toda la semana en Yokohama. "Sólo hay que pasearse por nuestro hotel para ver que hay mucha gente apoyándonos. Lo agradecemos y nos hace sentir muy bien. Gracias a lo que hacemos en el campo la gente disfruta", concluyó.