El abandono ayer de Vicenç Reynés, del conjunto suizo IAM , en la sexta etapa del Critérium Dauphiné complica al profesional mallorquín convertirse en uno de los nueve ciclistas de su equipo que disputará el Tour de Francia, a partir del 4 de julio.

En una jornada con lluvia y frío, Reynés decidió poner pie a tierra y dejar la carrera francesa cuando apenas se habían recorrido unos 55 kilómetros y el pelotón afrontaba la escalada al Col de la Croix-Haute, de segunda categoría y tercero de los seis puertos de montaña que presentaba la pestosa etapa de la ronda gala.

El jueves, en la quinta etapa del Dauphiné, coincidiendo con el primer contacto de la carrera francesa con la montaña, Vicenç Reynés ya dio muestras de sufrimiento, concluyendo en meta en el puesto número 101, cediendo 17:03 minutos al vencedor del día. Un retraso que le hizo caer al puesto número 119 de la general, a 26:06 del líder y maillot amarillo.

Por su parte, el italiano Vincenzo Nibali, del Astana, hizo honor bajo el aguacero a su apodo de 'Tiburón' y se enfundó el maillot de líder del Dauphiné en la etapa disputada entre Saint Bonnet en Champsaur y Villard-de-Lans. Una carrera que registró la victoria del portugués Rui Costa, del Lampre, y una gran actuación a cargo del murciano Alejandro Valverde. del Team Movistar, y tercero en meta.

Rui Costa, campeón del Mundo 2013, anuló un demarraje de Nibali a 1,5 kilómetros de meta que dejó clavados a Valverde y al francés Gallopin, de Lotto Soudal. Todos ellos protagonizaron la fuga buena del día, que se fraguó a 100 kilómetros de meta.

En el último kilómetro, Costa rebasó a Nibali para alzar los brazos en meta con 5 segundos de ventaja. Fue el único que reaccionó a tiempo al arreón del 'Tiburón' de Messina, que después de llevar el peso de la fuga quería darse un homenaje completo, y así olvidar el traspié de la víspera. No pudo hacer lo mismo Valverde, que entró a 38 segundos de Costa y ahora es tercero de la general, tras el italiano y el rematador portugués.