El caso por la muerte brutal y violenta de Sorky das Pont se cerró ayer con una condena de ocho meses de prisión contra Eugeni Sánchez, así como la imposición en su contra de tres años de suspensión especial para el ejercicio de cualquier profesión, comercio o actividad relacionada con animales -el máximo posible- y asumir el pago de las simbólicas costas del largo proceso judicial en su contra, que se ha prolongado a lo largo de dos años y cuatro meses.
La condena con pena de prisión contra Eugeni Sánchez, fruto de un acuerdo del abogado defensor con las acusaciones, se presenta ejemplar y permite la primera resolución de la historia que incluye cárcel para un caso de maltrato animal en alguno de los cinco hipódromos de Balears.
La defensa del único imputado por la barbarie que acabó con la vida de Sorky das Pont, el 30 de diciembre del año 2012, en el Hipòdrom de Manacor, alcanzó un acuerdo con los representantes de las cuatro acusaciones personadas en la caso; el Ministerio Fiscal, el Ajuntament de Manacor, el Institut de l'Esport Hípic del Consell de Mallorca y la Asociación Balear de Abogados por los Derechos de los Animales (Abada).
La entente a cinco bandas, que aceleró la resolución del caso, contempla la condena que finalmente impuso el magistrado Eduardo Calderón tras asumir en público el acusado Eugeni Sánchez la autoría de la muerte violenta de Sorky das Pont. De esa forma, aceptó que tras una mala carrera, en la que finalizó distanciado, golpeó con una barra en la cabeza al caballo en varias ocasiones, en dependencias del Hipòdrom de Manacor, hasta provocar el óbito del desafortunado equino.
Sin indemnización
La inculpación de Eugeni Sánchez y su aceptación de la condena evitó que se celebrase el juicio y que tuviesen que declarar, en calidad de testigos, su socio y copropietario de Sorky das Pont, Pedro José Tous Roca, y el entrenador y conductor profesional de caballos, Mateu Riera 'Prim'.
Igualmente, el juez destacó durante el acto del juicio que no había solicitud de indemnización contra Eugeni Sánchez por parte de la propiedad de Sorky das Pont y que por esa circunstancia quedaba exhimido de cualquier tipo de compensación económica.
