Rafel Nadal, número 3 del mundo, declaró, tras su eliminación en el torneo de Basilea, que pone fin a su temporada y que pasará por el quirófano el 3 de noviembre para operarse de la apendicitis que arrastra. Poco después de perder en los cuartos de final del torneo de Basilea ante el croata Borna Coric, de 17 años, por 6-2 y 7-6 (4), Nadal aseguró que no jugará más torneos en lo que queda de temporada ya que dentro de nueve días se operará de apendicitis.

De esta manera, Nadal no estará la semana que viene en el Masters 1.000 de París ni en el torneo de Maestros de Londres, que comienza el 9 de noviembre, seis días después de la operación. La baja de Nadal en el Masters abre las puertas del torneo de Londres al noveno de la clasificación, puesto que actualmente ocupa David Ferrer. "No voy a competir ni en París ni en Londres porque no estoy en condiciones de competir", dijo el mallorquín.

Coric protagonizó la gran sorpresa del torneo de Basilea. El croata, 124 del mundo, y con un corto historial que le ha visto brillar en los torneos juniors del Grand Slam (ganador Abierto Estados Unidos, semifinalista en el Abierto de Australia y Roland Garros, todo en 2013), justificó ser una de las jóvenes promesas del tenis. A Nadal le costó entrar en el partido, prácticamente media hora. Tiempo que precisó Coric para sorprender a todos y situarse con un contundente 5-0 en el marcador, tras romper el saque del español en el primero, tercero y quinto juego. Y eso que a Coric no le acompañaba el acierto con su primer saque, pero dominaba a un Nadal estático y excesivamente fallón. El mallorquín se encontraba incómodo ante un rival que no sólo le aguantaba el peloteo, sino que se lo ganaba la mayoría de las veces. Y que, además, ponía una mayor ambición, mejores golpes y castigaba un revés de Nadal que no funcionaba.

No fue hasta el sexto cuando Nadal anotó su primer juego, además sobre saque de su adversario. Habían transcurridos veintisiete minutos de partido. En el octavo el joven croata se hizo con el primer set, por 6-2.

La segunda manga fue igualada. Nadal mejoró. Mantuvo su saque (sólo cedió una bola de rotura y la salvó) y metiendo algo de presión a Coric. Pero el croata mantuvo su descaro y en nada acusó la presión de un jugador al que, además, admira, y se llevaba el set y el partido.

Coric, que había entrado en el cuadro grande con un plaza de invitación y había dejado en la cuneta en este torneo a Ernets Gulbis, sexto favorito, y Andrey Golubev, ponía la guinda a su gran actuación batiendo a Nadal y plantándose en las semifinales sin ceder set alguno.