La trascendencia e ilusión distinguen al ´Gran Premi Nacional´, la clásica del trote balear que, con 100.000 euros a repartir en premios, se disputará el domingo, día 18, en el Hipòdrom Son Pardo, programada para las 17:50 horas y que televisarán en directo el canal público IB3TV y el francés Equidia para más de 40 países.
El potro mallorquín Bo Pou Rafal, en preparación en el centro de entrenamiento de París-Grosbois, afrontará la prueba como favorito y caballo a batir. Una doble condición que ayer reforzó el sorteo de dorsales de salida tras el autostart. Una suerte en la que se le adjudicó el número dos y evitó el uno, la gran preocupación de su propietario y criador, Damià Ginard, así como la de su entrenador y conductor, Manu Allard.
"Estamos contentos porque el número dos nos favorece y en el sorteo hemos evitado el uno, que siempre es una amenaza, ya que te puede dejar bloqueado por la parte interior en el pelotón si no sales rápido y algunos rivales te quedan por delante", destacó ayer el artanenc Damià Ginard sobre el resultado del sorteo de dorsales.
"A Manu (Allard) también le gusta el número dos, el único número que no quería era el número uno, que era el que teníamos miedo que nos tocase", explicó el propietario sobre sus temores.
"En principio parece que hemos tenido un poco más de suerte nosotros que Boira de Llevant, que saldrá por todo el exterior, con el número ocho", admitió Ginard sobre la mejor fortuna de su caballo sobre su gran rival en la lucha por la victoria. Una yegua que entrena y conduce Toni Frontera, propiedad de Joan Llabata, a la vez presidente de la Federació Balear de Trot (FBT). "No es un mal número para nosotros", destacó Llabata tras ser él personalmente el encargado de sacar la bola que dio a su yegua el número ocho.
Bruixa de Font, con el 12
En el acto del sorteo, presidido por la consellera insular Catalina Soler -siempre muy protagonista-, a la principal baza del segundo pelotón de salida del ´Gran Premi´, la yegua Bruixa de Font, le tocó en suerte defender el número 12. Un resultado que aceptó con optimismo Jaume Morro, su criador y propietario. "Me gusta, especialmente porque nos coloca tras el autostart por detrás de dos caballos rápidos, como es el caso de Best In y Brandy d´as Pont", destacó el popular y exitoso ganadero natural de Búger.
