­El Sub 23 menorquín Rubén Sánchez, del equipo catalán Bicis Esteve, es el nuevo líder de la XXX edición del Trofeu Ciclista Pla de Mallorca, tras imponerse ayer en su segunda etapa, con final en el alto del Castell de Bellver, promediando una velocidad media de 42.39 kilómetros por hora sobre un recorrido de 85 kilómetros.

La estrategia de los peones del Bicis Esteve resultó perfecta, ya que mientras buena parte del pelotón estaba atento al anterior maillot amarillo, Joan Batle, el nuevo líder se metió en una escapada de diez ciclistas que llegó a meta y dio un vuelco a la clasificación general, al tiempo que se regalaba el lujo de ganar en Bellver por segundo año consecutivo. Junto a Rubén Sánchez se metieron en la escapada: Dani Crespí, Isidre Amengual, Pere Timoner, Miguel Angel Muñoz, Jan Eric Schwarzer, Paco Calzada, Pere Amengual y Lorenzo Crespí.

En una etapa con un perfil sinuoso, ninguno de los hombres importantes de la carrera -como Pedro Palou, Albert Muntaner o Rafel Miralles- entraron en el corte del día y en el gran pelotón ningún equipo tomó decididamente la responsabilidad de la persecución. Los equipos más perjudicados por esta situación fueron el Pollença y el Metalblinds.

Tras perder a uno de sus integrantes, la escapada afrontó la ascensión final al Castell de Bellver con Rubén Sánchez dominando la situación e imponiéndose en meta a Dani Crespí, mejor sénior, y con ocho segundos de ventaja sobre Pere Timoner. El pelotón principal terminó encabezado por Joan Batle y con Marc Buades, decimosegundo, de nuevo como el mejor júnior de la carrera y de la general.

Las importantes diferencias establecidas por la etapa palmesana complican que, salvo gran sorpresa o debacle, los ocho primeros de la general serán quienes lucharán por el triunfo absoluto.

Pere Llull, nuevo líder del ´Petit´

La etapa del ´Pla Petit´ se saldó con el triunfo parcial del italiano Cesare Danesse, del Ciclos Bando, por delante de Pere Llull, del Grupo Fontanet de Sineu, quien es el nuevo líder de la carrera gracias a las bonificaciones que le reportó su segunda posición. Esa sentencia fue la que dictó una prueba de 36 kilómetros de recorrido, sin sobresaltos, que su ganador cubrió a un promedio de 43.33 kilómetros por hora, con la participación de 117 ciclistas.

Ninguna intentona de escapada logró su objetivo y el grueso del pelotón afrontó la ascensión final a Bellver, donde Danese impuso su buen golpe de pedal, como ya hizo recientemente en Lloret.