Los entrenadores del derbi balear de Segunda B, Joan Esteva y Nico López, se vieron ayer las caras en el recinto donde se disputará el próximo domingo, a las 12 horas, el partido, el Nou Camp de Inca. Todo fueron buenas palabras y buenos gestos entre ambos técnicos. Ambos se saludaron y se dieron la mano, comentaron el buen estado del terreno de juego y hablaron varios minutos. Apenas dialogaron de temas deportivos guardando cada uno sus cartas. Sí admitieron que no existe ningún problema entre ellos y se despidieron citándose ya para el interesante encuentro.