"Hay que respetar las decisiones que quieran tomar los dirigentes del club", afirmó tras el partido Pep Sansó, muy tranquilo en cuanto a su situación en el banquillo blanquiazul. "Estamos en contacto muy a menudo y ellos saben que si quieren tomar una decisión no habrá problemas por nuestra parte", añadió.

Tampoco le extrañaron a Sansó las manifestaciones de los aficionados: "Son críticos cuando el resultado es adverso y aplauden cuando ganamos".

El técnico blanquiazul reconoció que no habían sido capaces "de darle fluidez al juego" y explicó que había dividido la temporada "en tres fases: 14 partidos para hacer el equipo, 14 para consolidarse y 14 para estar arriba".