No era una reunión de jefes de Estado, ni siquiera se estudiaba la vacuna de la enfermedad más contagiosa, pero el encuentro entre Rafel Nadal y Cristiano Ronaldo en Santa Ponça tuvo tratamiento de alto secreto. Como mínimo. El tenista mallorquín y el delantero del Real Madrid rodaron un anuncio de Nike en el ´Country Club´ de la localidad calvianera con un hermetismo tan exagerado como ridículo.

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