¿A qué juega el Mallorca? Esta es la gran pregunta que se hacen los poco más de diez mil aficionados que cada quince días se dan cita en el Iberostar Estadio. La llegada de Joaquín Caparrós el pasado 4 de octubre, tras la salida de Michael Laudrup, no ha frenado la incercia perdedora de un equipo condenado a sufrir una temporada más hasta la última jornada. Pero, además de no haberse dado un giro a los malos resultados, la propuesta del técnico andaluz es cuando menos sospechosa.
Ya sea porque la calidad de la plantilla no da más de sí o porque el técnico todavía no ha dado con la tecla, lo cierto es que el equipo ofrece jornada tras jornada una imagen muy pobre, incapaz de llevar el peso de los partidos. El último ejemplo fue el domingo, ante el colista. El Racing de Cúper fue el dominador durante muchos minutos de la primera parte y a partir de que Ariel Nahuelpan acortara distancias a quince minutos del final del partido. Caparrós, como antes Laudrup, carece de un líder que sepa llevar la ´manija´ del equipo, lo que se conoce como un ´cerebro´. Con carencias en todas las líneas, sufre durante los partidos unas ´pájaras´ monumentales que le han costado más de un punto. Aouate evitó el domingo el empate con el tiempo cumplido y en Granada se dejaron robar la cartera en cinco desastrosos minutos cuando dominaban en el marcador. Lo mismo ocurrió ante el Sporting en Palma, sin duda la derrota más dolorosa porque también se dejaron remontar ante un rival que, cumplido el primer tercio del campeonato, se encuentra en zona de descenso.
Las jugadas de estrategia siguen siendo un quebradero de cabeza. Con el marcado por el Racing son ya seis los goles encajados por el equipo a balón parado, una sangría que han costado muchos puntos. En el aspecto ofensivo, y a la espera de que Ogunjimi pueda jugar –será ante el Levante en el primer partido de 2012–, no hay nadie que marque las diferencias. Hemed solo marca de penalti y únicamente Víctor, que no es un goleador, parece capaz de perforar la portería rival. Demasiadas dudas por despejar.
Por otro lado, la Federación Española confirmó ayer que el partido Granada-Mallorca, suspendido el pasado día 20 en el minuto 61 con el resultado de 2-1, después de que un paraguas lanzado desde la grada alcanzara a un árbitro asistente, se reanudará el miércoles 7 de diciembre a las 19:30. La RFEF también comunicó que el Comité Técnico de Árbitros ha decidido que el asistente que recibió el impacto, el catalán Aguilar Rodríguez, sea sustituido por el cántabro Díaz Casado en el equipo arbitral del encuentro, que dirigirá Clos Gómez, del colegio aragonés.
