El delantero Tomer Hemed se confirmó ayer como un excelente lanzador de penaltis y como un mal rematador en jugada. La consecuencia de ello es que la ´penaltidependencia´ del Mallorca fue un recurso para puntuar mientras duró, pero pasó lo que tenía que pasar. Que llegara un partido en el que no se pitara una pena máxima y echáramos de menos al especialista. Sin penalti, no hubo punto, y se acabó perdiendo.

Caparrós cambia a Castro

El Chori fue el mejor mallorquinista del partido y empieza a parecerse al jugador que fue: rápido, desequilibrante y un peligro de cara a portería. Llegó Caparrós y anunció que el uruguayo era un jugador importante. Le ha devuelto la titularidad y ha conseguido que deje su indolencia en el vestuario. Marcó de cabeza y pudo volver a marcar de no ser por Juan Pablo.

Derrota en mal momento

Nunca es buen momento para perder, pero resulta peor todavía hacerlo antes de visitar el Camp Nou, donde lo lógico es perder, aunque hace un año el Mallorca empató. Dijo Caparrós que el empate en el Calderón sería bueno de ganarle después al Sporting. Y tras lo de anoche, ese empate se ha quedado en casi nada.