Joaquín Caparrós perfila el primer once con el que debutará como entrenador del Real Mallorca el sábado frente al Valencia. Por lo visto en el entrenamiento de ayer, el técnico utrerano no hará una revolución –al menos en cuanto a nombres se refiere– y se apoyará en el grueso de los futbolistas que tenían la confianza del destituido Michael Laudrup.

Bigas sustituirá al lesionado Cáceres en el lateral zurdo (también Kevin está de abaja) y Pereira entrará en sustitución del sancionado Emilio Nsue en la banda derecha. Son por tanto dos novedades forzadas por las circunstancias, pero podría haber una tercera. En el partidillo celebrado ayer en Son Bibiloni Caparrós ensayó con Víctor en punta. Tomer Hemed no estaba porque se encontraba concentrado con la selección de Israel, pero no hay que descartar que el técnico andaluz opte por el algaidí teniendo en cuenta que en los siete días que lleva entrenando al equipo apenas ha visto al israelí.

Los hombres que completarán el once serán los habituales de este inicio de temporada: Aouate se pondrá bajo los palos; Zuiverloon, Chico, Ramis y Bigas formarán en la zaga; Pereira, Martí, Pina y Castro jugarán en el medio y arriba Alfaro acompañará a Víctor o a Hemed. En todo caso, también cabe la posibilidad de que siente en el banquillo a Alfaro –como ya hizo Miquel Àngel Nadal en Pamplona– y sitúe arriba al algaidí y al israelí.

Sí habrá más diferencias en el estilo de juego. Caparrós apuesta por la táctica y la colocación y sus equipos son un bloque en el que prima el físico por encima de consideraciones estéticas. Tampoco engaña a nadie: lo único importante es el resultado, aunque haya que defenderlo ochenta minutos debajo de la portería. "La clasificación, amigo, la clasificación", es la máxima del preparador bermellón.

Nada que ver con el técnico danés, que no renunciaba a la posesión de la pelota ni siquiera ante rivales de entidad. Todavía se recuerda su debut ante el Real Madrid en la jornada inaugural del curso 2010/2011. Opuso un equipo ofensivo ante los de Mourinho y no dejó de atacar hasta el último minuto del partido. El resultado final fue de empate a cero.

Caparrós volvió a poner ayer el acento en el trabajo físico, una laguna en los tiempos del danés, cuando los rondos y el balón protagonizaban sus sesiones. Solo han pasado siete días desde que el utrerano asumiera el timón del equipo, pero se espera que el sábado los bermellones estén físicamente un escalón por encima.

El utrerano agrupó a los jugadores por posiciones y entrenó personalmente a los delanteros, mientras que su ayudante Luci Martín trabajó con los defensas.

El técnico ha aplazado hasta la próxima semana el inicio de sus sesiones de tecnificación con la cantera. Su intención es convocar a los jugadores más destacados juveniles, cadetes y del filial para tratar de inculcarles algunos conceptos futbolísticos de orden táctico.

Cada semana convocará a los jugadores por posiciones.