"Pase lo que pase, he tenido un año fantástico", señaló el mallorquín Rafel Nadal, quien aseguró ayer que "estar un mes parado tiene sus ventajas y sus inconvenientes", y confirmó que su hombro está perfectamente para afrontar la Copa Masters. "Puede estar bien o mal llegar al torneo sin haber jugado. Uno empieza sin práctica, pero por otro lado, está más descansado. Esta es la superficie más difícil para mí, es un reto", reconoció.
Hace un año, Nadal, que ganó tres de los cuatro Grand Slams de la temporada, perdió sus tres partidos de grupo en la Copa Masters. "Si no estoy bien, esta es una superficie muy difícil para que yo pueda ganar", indicó el mallorquín, que se quejó del bote bajo de la pelota en la pista rápida e indoor del moderno estadio O2, una circunstancia que no favorece su juego.
Nadal señaló que el entrenamiento para la temporada 2011 comenzará poco después de la cita de Londres. "Tendré tres o cuatro días libres y luego empezaré a entrenar de nuevo", dijo, e incidió en la necesidad de modificar el calendario con el fin de que la temporada no sea tan pesada para los tenistas, la mayoría de los cuales llegan muy mermados en sus condiciones físicas al final de temporada.
Según el manacorí, el cambio más apropiado sería que con el Abierto de Estados Unidos y la Copa Masters se terminaran "los torneos obligatorios" (aquellos que puntúan en el ránking mundial de la ATP). "Que no se obligue a los jugadores a competir más, pero que también se les dé la opción", es la propuesta de Nadal, cuyo objetivo descartó que sea mantenerse en la primera posición de esa lista, sino "seguir ganando y estando arriba".
El mallorquín volvió a demostrar que ahora es capaz de disfrutar más de sus logros, después de la experiencia vivida en 2009, cuando atravesó un mal episodio físico y personal. "Éste ha sido un año fantástico", insistió Nadal, que ayer conoció que la ATP le ha concedido el premio de la deportividad 2010, galardón que en los últimos seis años había ganado Federer. "Seguro que volverá a haber momentos no tan buenos, pero hay que estar preparado para afrontarlo", señaló el número uno del mundo que tiene en Londres una meta, ganar la Copa Masters, su única asignatura pendiente.
