La mallorquina Luna Sobrón no dio tregua a sus rivales y se adjudicó ayer en Denia la Final Lacoste Promesas con superioridad, con tres golpes menos que la castellonense Natalia Escuriola. En categoría masculina venció el inglés Kieron Fowler, que vive desde hace diez años en Alicante.

Luna Sobrón entregó una segunda tarjeta con el par del campo y siempre se mantuvo al mando de la clasificación.

La mallorquina, de 16 años y estudiante de Primero de Bachillerato en la rama de Ciencias, ha sido subcampeona de España en las categorías Benjamín, Alevín, Infantil y Cadete y ayer puso en práctica los consejos que le dio José Mari Olazábal durante la vuelta de entrenamiento en La Sella: "Chema me dijo que me colocase más centrada porque tenía la bola hacia el pie izquierdo, y Nacho Garrido que subiese el palo más fluido y no hiciese el swing tan rápido. He aplicado lo que me dijeron y me ha salido casi todo", indicó.

"He jugado bien y he pateado decente; ha sido un torneo muy divertido y lo hemos pasado muy bien. Natalia ha metido tres birdies seguidos, pero yo iba concentrada en mi juego sin pensar en nada más", reconoció Luna.