Poco tiempo les ha faltado a los dirigentes balericos para darse más importancia de la que tienen. Con una masa social importante y fiel, iniciaron tras el ascenso la construcción del equipo con discreción. Pero no saben, les puede las ganas de salir en la foto. El ejemplo, lo de Lanzarote: citaron a los medios a su presentación, pero sin dar su nombre y hablando de ´un fichaje mediático´. Ridículo, como no dejar hacer una foto a toda la plantilla en la presentación.